Qué es la conducción distraída y qué sanciones tiene
La conducción distraída tiene que ver con aquellos malos hábitos que impiden que la atención del conductor esté puesta en el camino.
La conducción distraída es una serie de prácticas o malos hábitos que desarrollan algunos conductores y que terminan aumentando el riesgo de un accidente de tránsito, específicamente aquellos hábitos que impiden que sus manos estén puestas sobre el volante y su atención esté puesta en el camino.
Comer, usar el teléfono o incluso pensar en ciertas cosas mientras se conduce un vehículo pueden ser actividades peligrosas para el conductor y los pasajeros de un vehículo. Muchas de estas prácticas están prohibidas y algunas de ellas pueden llegar a ser sancionadas por las autoridades.
¿Qué es la conducción distraída?
Toda actividad que desvíe la atención del conductor a otras cosas que no sean conducir se considera como conducción distraída. Aunque el uso de teléfonos inteligentes es la práctica más peligrosa, existen muchas otras que también aumentan los riesgos y representan una de las principales causas de accidente de tránsito en Estados Unidos.
Tipos de distracciones
De acuerdo con las autoridades del transporte, existen diversos tipos de distracciones, las cuales suelen estar relacionadas con los sentidos que se usan para poder conducir:
- Distracciones visuales: son aquellas que obligan al conductor a quitar la vista de la carretera, como el uso del teléfono inteligente, ya sea para escribir/leer mensajes o para responder llamadas.
- Distracciones manuales: son aquellas que impiden que el conductor tenga ambas manos sobre el volante. Comer o ajustar el volumen de la música o cualquier otro control del vehículo pueden considerarse como distracciones manuales.
- Distracciones cognitivas: son aquellas que impiden que el conductor se concentre en conducir. Los pensamientos generados de discusiones, situaciones difíciles o procesos traumáticos pueden generar este tipo de distracción.
Sanciones por conducción distraída
Las sanciones por distraerte mientras conduces en Estados Unidos pueden variar de un estado a otro. A grandes rasgos, algunas de las más comunes son las siguientes:
- Multas: aunque pueden ser más altas o más bajas, según sean las leyes estatales, las multas por conducción distraída pueden variar de $100 a más de $500 por infracción.
- Puntos en la licencia: puedes comenzar a acumular puntos en tu licencia de conducir que, a largo plazo, pueden derivar en sanciones mayores como la suspensión.
- Aumento de primas de seguro: si las autoridades comienzan a sancionarte como conductor distraído, las compañías de seguro notarán que el riesgo en torno a ti ha crecido y, por ende, terminarán aumentando tu prima de seguro mensual o anual.
- Posibles cargos penales: si te ves involucrado en un accidente de tránsito con saldos lamentables, puedes tener problemas legales que impliquen cargos penales, pago de gastos médicos y tiempo en prisión.
Algunos estados suelen tener sanciones más severas para la conducción distraída, sobre todo cuando está asociada al uso de teléfonos inteligentes. Lo más recomendable es detenerse en un lugar seguro de la carretera si debes leer mensajes o hacer llamadas. También es recomendable hacer paradas específicas en ciertos puntos para comer o realizar ciertas actividades que implican distracción, sobre todo si recorres grandes distancias.
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