Un Subaru WRX logra vencer a un Lamborghini Murcielago en la pista
Un Subaru WRX hatchback fue comprado por poco más de $18,000 dólares y modificado al punto de convertirlo en una maquina imparable. Con 304 CV, el Subaru fue capaz de vencer a un Lamborghini Murcielago de 572 CV, demostrando que no se necesita gastar tanto para tener un vehículo potente
Siempre es divertido ver a un deportivo antiguo tuneado enfrentarse a un supercoche nuevo en una carrera de aceleración al estilo de David y Goliat. Si se tunean, incluso los coches antiguos más baratos pueden alcanzar la velocidad de un supercoche por una fracción de su precio. Obviamente, un superdeportivo es mucho más que velocidad, pero si lo que buscas es velocidad, puedes encontrarla por poco dinero. El equipo de Driven Media acaba de demostrarlo con un Subaru WRX económico capaz de batir a un Lamborghini Murciélago.
Los preparativos del Subaru WRX
Su presupuesto para el Subaru WRX hatchback era de 15,000 libras ($18,153 dólares) y compraron el coche por 4,000 libras. Después de comprar el coche y arreglar muchos de sus problemas, se pusieron manos a la obra para modificarlo y ponerlo a punto. Le cambiaron el embrague, los amortiguadores, los neumáticos semicarenados, mejoraron los frenos, endurecieron las barras estabilizadoras, le quitaron 136 kg de peso y lo ajustaron para que rindiera 304 CV. En total, gastaron unas 9,000 libras, incluido el coste inicial del coche, muy por debajo de su presupuesto.
Las especificaciones del Lambo Murcielago
Un Lamborghini Murcielago de serie tiene 572 CV y, en este caso, utiliza una caja de cambios de levas de cambio rápido. Así que claramente tenía la ventaja en potencia y velocidad. Y como ambos coches tienen tracción a las cuatro ruedas, no debería haber mucha ventaja en agarre para ninguno de los dos. Sin embargo, al tratarse de un Lambo antiguo, era un poco difícil de manejar en la pista fría y húmeda, lo que acabó ralentizándolo bastante.
Las ventajas del Subaru WRX frente al Murcielago
Aunque el Subaru también era un poco incómodo, era más controlable que el Murciélago. El conductor comentó varias veces que parecía un coche de rally, que derrapaba en la mayoría de las curvas, pero eso lo hacía más divertido. También parecía más rápido desde el interior del coche, debido a la falta de amortiguación acústica que se eliminó para ahorrar peso.
Después de conducir el Lambo por la pista, al piloto le temblaban las manos tanto por los nervios como por la emoción. Parecía una conducción emocionante pero también aterradora. El Subaru también parecía una pasada, pero de una forma más segura, y el piloto parecía sonreír durante toda la vuelta. Esa sensación de seguridad llevó al piloto a tener un poco más de confianza porque fue capaz de batir su tiempo en el Lamborghini, mucho más potente.
El Subaru tuneado de Driven Media es un pequeño coche de pista impresionante, y eso sin siquiera utilizar todo su presupuesto. Esto demuestra que unas simples modificaciones pueden hacer que incluso un coche viejo y destartalado sea tan divertido -si no más- que un supercoche de seis cifras.
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