Reparar los aspersores del limpiaparabrisas: guía completa
Mantener los limpiaparabrisas en buen estado es fundamental para tu seguridad y la de los demás en la carretera.
Cambio de limpia parabrisas. Crédito: Shutterstock
La limpieza y el mantenimiento adecuado de los limpiaparabrisas de tu vehículo son esenciales para una conducción segura y cómoda. Este pequeño componente, a menudo subestimado, juega un papel crucial en garantizar que tengas una visibilidad óptima en todo momento.
Sin embargo, ¿qué ocurre cuando el limpiaparabrisas no funciona correctamente o los inyectores están obstruidos? A continuación, te ofrecemos una guía completa para que mantengas este sistema en perfectas condiciones.
¿Por qué hacer mantenimiento de los limpiaparabrisas?
Los limpiaparabrisas están diseñados para mantener el parabrisas libre de agua, suciedad y escombros, permitiéndote conducir de manera segura bajo cualquier condición climática. Sin embargo, cuando los inyectores de líquido limpiaparabrisas se obstruyen, todo el sistema puede fallar, comprometiendo tu seguridad en la carretera.
Uno de los errores más comunes que los conductores cometen es llenar el depósito del limpiaparabrisas con agua del grifo. Aunque esto pueda parecer una solución rápida y económica, el agua del grifo contiene impurezas como arena, cal y otros minerales que pueden acumularse en el sistema, causando obstrucciones. Por eso, es vital utilizar un líquido limpiaparabrisas de alta calidad, específicamente formulado para evitar estos problemas.
¿Qué hacer cuando el limpiaparabrisas no echa agua?
Si alguna vez te encuentras en la situación donde activas los limpiaparabrisas y no sale agua, es posible que te enfrentes a uno de estos problemas:
1. Depósito vacío: asegúrate de que el depósito esté lleno. Aunque parece obvio, es una de las causas más usuales.
2. Fuga en el circuito: revisa si hay alguna fuga en el sistema que esté dejando escapar el líquido.
3. Obstrucción en el sistema: la acumulación de residuos en los conductos puede bloquear el flujo de agua.
4. Fallo en la bomba de agua: si la bomba no funciona correctamente, el líquido no será expulsado con la fuerza necesaria.
5. Fusible averiado: un fusible quemado puede impedir que la bomba de agua funcione adecuadamente.
Cómo limpiar los inyectores del limpiaparabrisas paso a paso
Si sospechas que el problema es una obstrucción en los inyectores, sigue estos pasos para solucionarlo:
1. Verifica la bomba y los conductos, asegúrate de que la bomba funcione correctamente y que los conductos de los difusores no estén obstruidos. Si todo parece estar en orden, el problema podría estar en el manguito.
2. Localiza el conducto, identifica el conducto que lleva el líquido desde el depósito hasta los inyectores.
3. Limpia el aspersor, utiliza una jeringuilla para inyectar agua en el tubo del aspersor. Esto puede ayudar a desalojar cualquier obstrucción. Repite este proceso varias veces si es necesario.
4. Ajusta y calibra el eyector, una vez limpio, ajusta el eyector para asegurarte de que el líquido se disperse uniformemente sobre el parabrisas.
5. Introduce un cable fino si la obstrucción persiste, introduce un cable o alambre fino en los conductos para empujar cualquier residuo que esté bloqueando el paso.
Consejos adicionales para el mantenimiento de los limpiaparabrisas
El mantenimiento regular es clave para evitar problemas mayores. Aquí algunos consejos:
- No limpies el parabrisas en seco: limpiar el parabrisas sin líquido puede rayar el cristal y deteriorarlo. Asegúrate de que siempre haya líquido limpiaparabrisas en el depósito.
- Desatasca los inyectores regularmente: una limpieza periódica con agua o productos específicos para inyectores puede evitar obstrucciones y mantener el sistema en perfecto estado.
- Atención a la presión del agua: si notas que el agua sale con poca fuerza, podría ser indicio de una bomba averiada o de una obstrucción parcial.
Cuándo acudir a un profesional
Aunque la limpieza de los eyectores puede parecer una tarea sencilla, requiere ciertos conocimientos para asegurarse de que todo quede en perfecto estado. Si no estás seguro de cómo hacerlo o prefieres no correr riesgos, lo mejor es acudir a tu taller mecánico de confianza. Ellos cuentan con la experiencia y las herramientas necesarias para solucionar cualquier problema de manera eficiente.
Siguiendo estos consejos, podrás asegurarte de que siempre tendrás una visibilidad clara, sin importar las condiciones climáticas.
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