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Rolls-Royce Ghost Gamer: una inspiración de videojuegos lujosa

Descubre el Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer, el primer Bespoke inspirado en videojuegos clásicos, con diseño de 8 bits, detalles retro y lujo extremo.

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer mezcla lo lujoso con lo retro.

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer. Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

El lujo combinado con los videojuegos, esto es una temática que logró realizar el equipo de diseño Bespoke de Rolls-Royce para el Ghost. Hoy en día los videojuegos cada vez son más populares en todo el mundo, y han querido rendirle un homenaje, sobre todo a los juegos retro de los años 80 y 90.

La nueva creación de Rolls-Royce es llamada Black Badge Ghost Gamer. Es un vehículo inesperado, nostálgico y profundamente creativo inspirado en la cultura de los videojuegos de 8 bits. Este es un auto exclusivo que fue encargado por un cliente que es un gran coleccionista de los videojuegos árcade, pero que ama los Rolls-Royce, por lo que el equipo de diseño Bespoke de la marca, logró este gran reto.

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer tiene un color Azul Salamanca único.
Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer.
Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer: el primer Bespoke inspirado en videojuegos

La cultura de los videojuegos retro se encuentra en un momento de resurgimiento en todo el mundo. Muchas personas se han dejado llevar por la nostalgia, el coleccionismo y la revalorización de las primeras consolas y máquinas árcade. Por ello, uno de sus clientes planteó una personalización inspirada en estos juegos retro y Rolls-Royce respondió con un vehículo único: un homenaje inmersivo al diseño de 8 bits.

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer tiene varios detalles de juegos árcade.
Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer.
Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

Según Joshua McCandless, diseñador en jefe de Bespoke dijo que el objetivo no era solo reproducir gráficos y colores, sino hacer que entrar al auto se sintiera como pulsar “Start” en una máquina recreativa. Este Rolls-Royce Bespoke no es un simple ejercicio estético, es un objeto coleccionable creado para una nueva generación de clientes cuyo lujo también está ligado a la cultura digital.

Diseño exterior: un “Alienígena Travieso” en clave de 8 bits

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer tiene detalles de alienígenas en su exterior.
Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer.
Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

El Black Badge Ghost Gamer luce un acabado exterior bicolor que combina Azul Salamanca con un techo en cristal brillante sobre Negro Diamante. Este contraste recuerda los tonos metálicos y luminosos que caracterizaban a las máquinas recreativas clásicas.

Pero el verdadero protagonista es el motivo pintado a mano llamado “Cheeky Alien” o Alienígena Travieso, creado a partir de 89 píxeles de 3 x 3 mm. Este diseño, disponible en combinaciones verde con rosa o amarillo con azul, evoca directamente los gráficos simples y vibrantes de los videojuegos primitivos. A esto se suma la reja iluminada del Panteón y unas llamativas llantas forjadas Black Badge de 22 pulgadas.

Interior: un homenaje inmersivo a la cultura árcade

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer es el primer bespoke sobre videojuegos.
Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer.
Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

El habitáculo está inmersión con todas las temáticas de videojuegos. Este combina negro y Casden Tan, con bordados personalizados que identifican cada asiento como “Player 1”, “Player 2”, “Player 3” y “Player 4”, utilizando tipografías de estilo 8 bits. Los reposacabezas incluyen motivos del “Cheeky Alien”, también construidos a partir de 89 ‘píxeles’ bordados.

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer tiene partes inspiradas en una nave espacial.
Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer.
Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

La sección “Cascada”, ubicada entre los asientos traseros, es uno de los puntos más llamativos. Tiene una escena espacial de estilo árcade pintada completamente a mano sobre Fibra Técnica Black Badge. Incluye naves espaciales en acero inoxidable y un paisaje lunar con técnicas de pincel, esponja y aerógrafo. Su elaboración tomó más de dos semanas.

Además, múltiples detalles ocultos —como incrustaciones secretas en las mesas de picnic y grabados en las rejillas de ventilación— convierten el interior en un verdadero juego de exploración.

Iluminación al estilo arcade

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer tiene insiginias de jugador 1,2,3 y 4 para cada asiento.
Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer.
Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

La iluminación característica de Rolls-Royce con el Star Light alcanza un nuevo nivel con este proyecto Bespoke. La fascia del tablero, llamada “Laser Base”, recrea un escenario interestelar compuesto por 85 estrellas, ajustadas para simular el paso de una nave de combate pixelada.

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer tiene detalles de videojuegos 8 bits.
Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer.
Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

En el techo, el Starlight Headliner se transforma en un “Pixel Blaster”: 80 naves espaciales iluminadas con fibra óptica parpadean como si estuvieran disparando rayos láser. Incluso la función de Shooting Star fue reprogramada para imitar los efectos visuales de los videojuegos retro. Para completar la experiencia, los estribos iluminados muestran mensajes icónicos de árcade, como “INSERT COIN”, “PULSE START”, “LOADING…” y “LEVEL UP”.

Un precio que pocos pueden pagar

Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer fue un encargo de un amante de los videojuegos.
Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer.
Crédito: Rolls-Royce | Cortesía

El Rolls-Royce Black Badge Ghost Gamer es un encargo de muchos miles de dólares. No hay una cifra oficial del costo de esta personalización, sin embargo, el precio base del Ghost Black Badge es de unos $422,750 dólares, lo que pudiera duplicarse por todos los detalles únicos que tiene.

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