Alemania se niega a la prohibición de autos a gasolina emitida por la Unión Europea en 2035
La Unión Europea pretende prohibir la producción de autos con motor a gasolina en 2035, sin embargo, es una decisión que no muchos están aceptando. Algunos países como Alemania, han demostrado su rechazo a esta medida, y fabricantes de automóviles aseguran que aún se puede encontrar otra alterntaiva a la prohibición
BMW se niega también a interrumpir el desarrollo de autos con motor ICE. Crédito: BMW | Cortesía
El ministro de Finanzas de Alemania, Christian Lindner, dijo el martes que la nación no aceptará la prohibición de la Unión Europea de 2035 sobre los vehículos de combustión interna. En declaraciones a la asociación de la industria BDI, un grupo empresarial alemán que representa a más de 100,000 empresas, Lindner afirmó que habría nichos para los motores de combustión interna y que la prohibición estaba mal.
Otras naciones también se oponen a la prohibición de autos con motor ICE
La declaración de Lindner a los líderes empresariales de Alemania probablemente tenía la intención de calmar los nervios de la considerable industria automotriz de Alemania y una plétora de proveedores automotrices. Otras naciones con industrias similares también han rechazado la medida de la UE.
Miembros de alto rango de los gobiernos francés, checo e italiano han declarado que se oponen a una prohibición total, citando posibles daños económicos a medida que se acerca la fecha límite. Alemania, Francia e Italia son las tres mayores economías de la UE.
El ministro de transporte de Alemania asegura que la prohibición no es razonable
Este no es el primer rumor proveniente de Alemania sobre las acciones de la UE. El ministro de transporte de la nación también señaló que la prohibición no es razonable, y dijo que los combustibles sintéticos podrían ser una posible respuesta al objetivo de la UE de reducir las emisiones de carbono.
También han surgido preocupaciones de fabricantes de automóviles individuales, alemanes. BMW dijo que no planea interrumpir el desarrollo de motores de combustión interna en el corto plazo, y su director ejecutivo, Oliver Zipse, dijo que “la demanda de vehículos ICE seguirá siendo sólida durante muchos años”. Asimismo, los fabricantes de automóviles italianos se han opuesto ampliamente al mandato.
Una pérdida de empleos que afectaría la economía
El plan de la UE se enfrenta a serias críticas de voces poderosas sobre la prohibición. Para que su plan se lleve a cabo, parece necesario abordar sus impactos económicos proyectados. La Plateforme Automobile de Francia, el lobby automotriz más grande del país, estima que se podrían perder 100,000 empleos en la industria para 2035, lo que representa más de la mitad de su fuerza laboral.
Asimismo, proyecta que se necesitarían $21,000 millones de dólares de inversión en tecnología e infraestructura para alcanzar los objetivos de la UE. En Alemania, la historia es muy similar, con una décima parte de sus 830,000 puestos de trabajo relacionados con la fabricación de automóviles que están potencialmente en riesgo en la próxima década.
La decisión final sobre el plan de la UE llegará en los próximos meses cuando los países miembros den sus veredictos.
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