Los autos de segunda mano en los que más se manipula el cuentakilómetros
La venta de autos de segunda mano es una de las que son más engañados los compradores debido al “maquillaje” que le hacen a los vehículos tanto en pintura como en el cuentakilómetros.
Manipular el kilometraje puede ser penado por la ley Crédito: Shutterstock
Los autos de segunda mano que tienen más de 10 años de uso pueden tener muchos trucos si son puestos en venta. Muchos vendedores tanto particulares como concesionarios que ofrecen este tipo de servicio manipulan el estado original del carro. Aunque no es la mayoría de los autos que están en venta, ocurre mucho esta práctica.
Aunque el llamado “timo” de autos usados es una práctica que ocurre en todo el mundo, no es algo común, sobre todo en Estados Unidos, donde las leyes son bien claras con respecto a la venta de productos alterados para ofrecerlos a la venta. Según un estudio en España, el 8% de los autos vendidos en el mercado de segunda mano, tienen esta alteración. Mientras que, en Estados Unidos, casi medio millón de autos son modificados en su kilometraje.
El manipular el odómetro para la venta de un auto es un delito penado por la ley
La pregunta que más piensa un comprador de un auto es ¿qué auto comprar? Uno usado o uno nuevo. Eso dependerá del presupuesto que tenga cada persona; sin embargo, a veces pagar por un auto de segunda mano con el tiempo puede salir más costoso que uno nuevo. ¿Por qué? Por el reemplazo de piezas o partes que ya están desgastadas o que los vendedores disfrazan, para luego el comprador sufra los problemas que no tenía cuando lo compró.
Una de las técnicas que más tiempo lleva es la manipulación del odómetro o cuentakilómetros. Es una práctica negativa que usan muchos vendedores para reducir el kilometraje del auto y seducir al comprador de que es un auto con poco recorrido. Según expertos, los autos importados son al menos tres veces más manipulados que los de producción local.
En Europa es un gran problema debido a que muchos vehículos pueden pasar por diferentes países esquivando los controles de calidad del auto cuando se va a comprar. Según un informe realizado en 14 países europeos señalaron que es algo difícil de controlar según lo que dicen: “Esto se debe a que las transacciones transfronterizas son difíciles de rastrear, por lo que los estafadores se aprovechan de esta situación”.
Autos entre 10 y 20 años de antigüedad son los más manipulados en el kilometraje
Agregan que al menos el 11,5% de los vehículos revisados tienen alteraciones en el odómetro y el 37% de los autos en venta tienen alguna falla oculta. Los autos más propensos al truco del odómetro son coches usados entre 10 y 20 años de antigüedad que reducen hasta el 18,5% el kilometraje original.
Lamentablemente, la detección de algún fraude en los actuales odómetros digitales son más difíciles de detectar que los mecánicos, por ello se deben pedir registros para hacer el seguimiento del auto en su historia.
- Pida ver el título y compare el kilometraje con el odómetro del vehículo. Asegúrese de examinar el título detenidamente si la notación del kilometraje parece oscurecida o no es fácil de leer.
- Compare el kilometraje en el odómetro con el kilometraje indicado en los registros de inspección o mantenimiento del vehículo. Además, busque pegatinas de mantenimiento y cambio de aceite en las ventanas o marcos de las puertas, en la guantera o debajo del capó.
- Examina los neumáticos. Si el odómetro de su automóvil muestra 20,000 o menos, debe tener los neumáticos originales.
- Observe el desgaste del vehículo, especialmente los pedales del acelerador, freno y embrague, para asegurarse de que parezca consistente y apropiado para la cantidad de millas que se muestran en el odómetro.
- Solicite un informe del historial del vehículo para verificar si hay discrepancias en el odómetro en el historial del vehículo. Si el vendedor no tiene un informe del historial del vehículo, utilice el VIN del automóvil para solicitar un informe del historial del vehículo en línea.
- Si sospecha de fraude, comuníquese con la agencia de aplicación de la ley de su estado.
El alterar el odómetro es una práctica penada por la ley. Dependiendo de la legislación del estado, las penas pueden ir desde un mes en prisión hasta 10 años de cárcel. Además de multas por miles de dólares.
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