¿Los concesionarios ganan dinero reparando los retiros de autos?

Las fallas en los autos son muy comunes, especialmente cuando ya tienen tiempo de uso y cuando no se realizan servicios de mantenimiento con regularidad. Sin embargo, los vehículos también pueden tener fallas por defectos de fábrica y esas reparaciones son responsabilidad de los fabricantes.

Cuando los vehículos salen con defectos, los fabricantes de auto hacen retiros de autos para realizar las reparaciones necesarias y que los propietarios no se pongan en peligro.

¿Qué es un retiro de autos?

En el sitio web safercar.gov explican que “se emite un retiro cuando un fabricante o NHTSA determina que un vehículo, equipo, asiento o llanta crea un riesgo de seguridad irrazonable o no cumple con los estándares mínimos de seguridad. Los fabricantes están obligados a solucionar el problema reparándolo, reemplazándolo, ofreciendo un reembolso o en casos raros, volver a comprar el vehículo.”

Afortunadamente, es completamente gratuito para el consumidor, sin embargo, alguien tiene que pagar por los gastos.

¿Ganan dinero los concesionarios por reparar los retiros del mercado?

Según My Car Voice, a los concesionarios les gusta el trabajo de retiro. Principalmente, se debe a que los retiros son un problema con una solución bien documentada por parte del fabricante. Por lo tanto, todo lo que debe hacerse una vez que el vehículo está en el taller es que un técnico siga las instrucciones del fabricante de autos. Las piezas se proporcionan explícitamente para la reparación, lo que significa que el distribuidor no aceptará a los clientes hasta que lleguen. Como resultado, todo está listo y los retiros son una forma rápida y fácil de completar los clientes en los libros de registro.

Atender los retiros de autos son una gran fuente de ingresos porque el fabricante paga por ellos. Así es; en lugar de que el cliente tenga que pagar, el fabricante asume la responsabilidad de sus acciones. Por lo tanto, no solo se le paga al distribuidor, sino que no tiene que preocuparse por un cliente enojado que no está contento con el precio o que quiere negociar. Es una situación en la que todos ganan para los concesionarios, por lo que están encantados de aceptar su retiro del mercado y repararlo.

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