Sanciones por conducir con licencia suspendida en New York

Conducir con una licencia suspendida en el estado de Nueva York es una infracción grave que puede conllevar severas sanciones adicionales, tanto penales y administrativas. Las autoridades tratan estos casos como delitos que ponen en riesgo la seguridad pública, por lo que las consecuencias pueden ir desde multas económicas hasta penas de cárcel. Te contamos los principales aspectos legales y sanciones aplicables a estos casos.

¿Qué significa tener la licencia suspendida?

Una licencia suspendida significa que el conductor no tiene derecho legal a manejar un vehículo durante un período determinado por las autoridades. Las suspensiones pueden ser temporales o indefinidas, dependiendo de la gravedad de la infracción que se haya cometido. Entre las razones más comunes para una suspensión se encuentran:

• Acumulación excesiva de puntos por infracciones de tránsito.
• Conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas.
• No presentarse ante un tribunal por una multa de tráfico que no ha pagado.
• Falta de pago de la prima del seguro del auto.
• Falta de pago de pensión alimentaria o manutención infantil.

Agravios legales por conducir con la licencia suspendida

En Nueva York, conducir con una licencia suspendida se considera un delito penal tipificado bajo el artículo 511 del Código Penal. Existen tres niveles de gravedad:

1. Conducción agravada sin licencia (AUO) de tercer grado

Es la forma más común de este delito y se considera un delito menor (misdemeanor). Puede sancionarse con:

• Hasta 30 días de cárcel.
• Multa de hasta $500.
• Un cargo permanente en el historial penal.

2. AUO de segundo grado

Se aplica cuando el conductor ha cometido la misma infracción previamente o si la suspensión está relacionada con una infracción por alcohol o drogas. Las sanciones incluyen:

• Hasta 180 días de cárcel.
• Multa de hasta $1,000.
• Posible inmovilización del vehículo.

3. AUO de primer grado

Es un delito grave (felony). Ocurre en casos donde el conductor está bajo suspensión por conducción en estado de ebriedad o ha cometido múltiples infracciones. Las consecuencias son más severas:

• Hasta 4 años de prisión.
• Multas que pueden superar los $5,000.
• Confiscación permanente del vehículo en algunos casos.

Cargos adicionales y consecuencias colaterales

Además del delito por conducir con la licencia suspendida, el infractor puede enfrentar otros cargos relacionados, como:

• Conducción sin seguro de auto o sin cobertura de alguna aseguradora.
• Posesión de documentos falsos, como la licencia de conducir o el registro.
• Violaciones a la libertad condicional.

Estas acusaciones pueden agravar el caso y resultar en mayores sanciones, incluyendo la imposibilidad de recuperar la licencia en el corto plazo.

¿Cómo enfrentar una acusación por conducir con la licencia suspendida?

Frente a una acusación de este tipo, se recomienda buscar asesoría legal de inmediato. Un abogado con experiencia en leyes de tránsito en Nueva York puede:

• Evaluar si la suspensión fue válida.
• Explorar la posibilidad de reducir los cargos.
• Ayudar a restablecer la licencia legalmente.

En algunos casos, el tribunal puede considerar alternativas como el uso de una licencia restringida o la inscripción en programas de rehabilitación, en el caso de que la acusación esté relacionada con el abuso de sustancias.

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