Problemas en motores diésel: fallas frecuentes que debes conocer
Los motores diesel presentan fallas como los motores a gasolina, aunque algunas son más comunes en la mayoría de este tipo de motores.
Los motores diesel destacan por su fuerza y durabilidad Crédito: slaved | Shutterstock
Una de las grandes ventajas de los motores diésel es su fuerza y durabilidad. Además, son más eficientes en situaciones donde ameriten bastante arrastre de peso y una excelente capacidad de torsión. Por eso son los ideales para usarlos en camionetas grandes, camiones pesados y otro tipo de maquinarias.
Hoy en día, todavía hay marcas de autos que continúan usando los motores diésel, sobre todo en Estados Unidos y en Europa, aunque cada vez son menos los vehículos comerciales que lo utilizan. Pero, estos motores no escapan de las fallas, por eso hay algunas que son bastante frecuentes en los diferentes tipos de autos. En este artículo te vamos a señalar algunos de los problemas más comunes en los motores diésel.
Fallas frecuentes en los motores diesel a nivel general
Aunque las fallas en motores diésel pueden deber a diferentes situaciones. Hay unas que son bastante usuales en la mayoría de los vehículos. Las que presentaremos a continuación son las que debes estar más atento si tienes un vehículo con motor diésel. Sin embargo, la recomendación es siempre estar atento a los ciclos de mantenimiento.
Fallas del inyector de combustible
Los inyectores de combustible desempeñan un papel fundamental en el correcto funcionamiento de un motor diésel. Con el tiempo, estos componentes pueden obstruirse, desgastarse o dañarse, lo que provoca una atomización incompleta del combustible, una distribución desigual del combustible y una reducción del rendimiento del motor. Los inyectores de combustible defectuosos pueden provocar fallos de encendido, disminución del ahorro de combustible e incluso calar el motor.
Problemas con el turbocompresor
Los motores diésel suelen depender de turbocompresores para aumentar la potencia y la eficiencia. Sin embargo, los turbocompresores son susceptibles a varios problemas, como fallas en los cojinetes, fugas de aceite y daños en las ruedas del compresor. Estos problemas pueden provocar una pérdida de impulso, una reducción de la potencia del motor y, en casos graves, una falla total del turbocompresor.
Mal funcionamiento de las bujías incandescentes
Las bujías son esenciales para arrancar un motor diésel, especialmente en climas fríos. Cuando fallan las bujías, puede resultar difícil arrancar el motor, lo que provoca retrasos frustrantes y posibles daños mayores si el motor se ve obligado a arrancar durante un período prolongado.
Contaminación del sistema de combustible
Los sistemas de combustible diésel son particularmente vulnerables a la contaminación por agua, suciedad u otras partículas extrañas. Esto puede provocar filtros de combustible obstruidos, fallas en la bomba de combustible e incluso daños a los inyectores de combustible. Mantener un sistema de combustible limpio es crucial para el funcionamiento confiable del motor.
Desgaste de los segmentos del pistón y del cilindro
Con el tiempo, la combustión constante y las altas presiones en un motor diésel pueden provocar el desgaste de los anillos del pistón y las paredes del cilindro. Esto puede resultar en una disminución de la compresión del motor, consumo de aceite y pérdida de potencia. Si no se soluciona, este problema puede, en última instancia, provocar una falla del motor.
Fallas del cigüeñal y del árbol de levas
Los componentes giratorios de un motor diésel, como el cigüeñal y el árbol de levas, están sujetos a tensiones y desgaste importantes. Las fallas en los cojinetes, la falta de aceite y otros problemas pueden causar que estos componentes críticos fallen, lo que provoca daños catastróficos en el motor.
Problemas del sistema de enfriamiento
Los motores diésel generan una cantidad significativa de calor y un sistema de refrigeración que funcione bien es esencial para mantener temperaturas de funcionamiento óptimas. Las fugas de refrigerante, las bombas de agua defectuosas o los radiadores obstruidos pueden hacer que el motor se sobrecaliente, lo que provoca más daños a los componentes y una posible falla del motor.
Problemas comunes en los motores diésel de Ford
Ford es una de las marcas que más motores diésel usa en sus vehículos. Sobre todo en su línea F. Podemos encontrar estos motores en los Ford F-150, F-250, F-350.
Ford Motor diésel 6.0 Powerstroke
- Fallas en la Junta de la cabeza y espárragos de la cabeza TTY.
- FICM: Falla del Módulo de Control de Inyección de Combustible.
- Problemas con el enfriador de aceite Powerstroke de 6.0L.
- Problemas con el enfriador de EGR.
- Problemas con la válvula EGR.
- Problemas con el turbocargador Powerstroke de 6.0L.
- Problemas con el inyector 6.0L Powerstroke HEUI.
- Falla de la bomba de aceite de alta presión (HPOP).
Ford Motor diésel 7.3 Powerstroke
- Válvula reguladora de presión de inyección (IPR).
- Módulo controlador de inyector (IDM).
- Sensor de posición de leva (CPS).
- Conectores del arnés debajo de la cubierta de la válvula (UVCH).
- Obstrucciones del filtro de combustible.
- Falla de la bomba de elevación.
- Sensor de presión de control del inyector (ICP).
- Calentamiento excesivo.
- Válvula de contrapresión de escape (EBPV).
Ford Motor diésel 6.7 Powerstroke
- Problemas con el turbocompresor.
- Problemas con la válvula EGR y el enfriador.
- Problemas con el inyector de combustible.
- Grietas en el colector de escape. (Hay un gran número de casos por roturas en el escape).
- Fugas de refrigerante del radiador.
- Fallas del sensor EGT.
Ford Motor diésel 6.4 Powerstroke
- Dilución de aceite (se debe cambiar antes de lo que señala el fabricante).
- Radiador con fugas.
- Mala economía de combustible. (Con el tiempo consume más diesel de lo normal).
- Falla del pistón.
- Enfriadores de EGR obstruidos.
Dmax Motor diésel 6.6 (GMC/Isuzu)
Los motores Dmax los podemos encontrar en algunos vehículos de General Motors y de Isuzu. Entre ellos están el GMC Sierra y el Chevrolet Silverado.
- Sobrecalentamiento de bujías.
- Fallas en los inyectores.
- Fallas en el sistema de combustible (rotura de bomba).
- Bomba de agua no duradera (se debe reemplazar antes de las 80,000 milas).
- Falla del embrague del ventilador.
- Recurrentes fugas de aceite.
Para abordar estos problemas comunes de los motores diésel, es fundamental cumplir con un programa de mantenimiento regular, utilizar piezas de repuesto de alta calidad y solucionar cualquier problema con prontitud. Si se mantiene alerta y proactivo, puede ayudar a garantizar la confiabilidad y el rendimiento a largo plazo de su equipo con motor diésel.
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