Los créditos para automóviles eléctricos de Tesla pueden valer miles de millones más con el nuevo crédito fiscal para EV
Las nuevas reglas que se han impuesto a los vehículos eléctricos para ser elegibles a un crédito fiscal han otorgado a Tesla una ventaja. Tesla ha ganado más de $6,000 millones de dólares con la venta de créditos regulatorios desde 2013 y ahora podría incrementar esa cantidad
No todos los autos de Tesla son elegibles en las nuevas regulaciones de crédito fiscal de Estados Unidos. Crédito: Tesla | Cortesía
Más de una docena en los EE.UU. siguen los estándares establecidos en el programa de vehículos de cero emisiones de California. Como parte del programa, se requiere que un cierto porcentaje de las ventas de un fabricante de automóviles sea completamente eléctrico a batería, de celda de combustible de hidrógeno o un híbrido enchufable.
Si el fabricante de automóviles no cumple con este umbral, será multado. Pero hay una trampa: los fabricantes de automóviles que tienen un exceso de estos créditos pueden venderlos a otros fabricantes de automóviles que no cumplen, como un elaborado juego de cartas coleccionables reglamentario que beneficia a los fabricantes de automóviles que invirtieron mucho en la fabricación de ZEV desde el principio.
Tesla se enriquece con los créditos regulatorios
Tesla no es ajeno al juego de créditos ZEV. De hecho, la compañía con sede en Texas ha aprovechado su posición como fabricante de automóviles exclusivamente eléctricos, obteniendo miles de millones de dólares en ingresos al vender estos créditos regulatorios a otros fabricantes de automóviles. Ahora se encuentra en la reserva más grande de estos créditos en los EE.UU. y, a pesar de que otros fabricantes de automóviles se subieron al carro de los vehículos eléctricos, estos créditos pueden volverse aún más valiosos para Tesla en los próximos años.
El aumento proyectado en la demanda es gracias a la reforma de crédito fiscal EV recientemente acuñada. A pesar de que hoy en día hay más de 50 vehículos ZEV a la venta, sólo 21 se ensamblan en América del Norte, un requisito previo para que se considere el crédito fiscal. Es posible que aún menos califiquen para el crédito fiscal de $7,500 dólares bajo los estrictos estándares que se establecen para dar forma a la elegibilidad del vehículo en los próximos años.
Desacuerdo de otros fabricantes de autos in sedes en EE.UU.
Esta elegibilidad se ha convertido en el tema de un acalorado debate internacional, algo que los fabricantes de automóviles extranjeros sin instalaciones de producción estadounidenses argumentan que dará ventajas de la era del proteccionismo a los fabricantes nacionales. Y si hay una fuerte caída en las ventas de vehículos que califican para ZEV simplemente porque un modelo no califica para el crédito fiscal EV, los fabricantes de automóviles que no cumplan con sus requisitos de crédito ZEV también podrían verse obligados a pagar fuertes multas.
Compra de créditos OEM
No es extraño que un fabricante de automóviles no cumpla con los requisitos de ZEV por sí solo, ya que los créditos sólo se pueden obtener vendiendo un vehículo en un estado que participa en el programa vendiendo un vehículo elegible. Para hacerlo aún más complicado, la venta de un vehículo no equivale a un crédito. Un vehículo puede valer tan poco como cero si no tiene ningún tipo de electrificación, o puede tener un límite de cuatro créditos si su rango (calculado en el Estándar de conducción del dinamómetro urbano, no en el número certificado por la EPA) es lo suficientemente alto.
Si un fabricante de automóviles no cumple con sus requisitos de crédito ZEV, puede optar por comprar créditos de otros OEM que tengan un excedente. Esto es algo que Tesla ha utilizado como fuente de ingresos confiable durante algún tiempo, generando alrededor de $6,300 millones de dólares desde 2013.
Los fabricantes de automóviles que no califican para el nuevo crédito fiscal EV pueden ver caer sus ventas en los estados que participan en ZEV simplemente porque otros vehículos que califican tienen un precio más atractivo. Esto podría conducir a un desequilibrio en el cumplimiento del crédito ZEV y requerir que los fabricantes de automóviles se apoyen más en fabricantes de automóviles como Tesla para comprar créditos.
A cuánto ascienden las multas
La multa general por cada crédito no producido por un fabricante de automóviles es de $5,000 dólares. Esto le da a Tesla (y otros fabricantes con un excedente de créditos) la oportunidad de participar y proporcionar el crédito necesario a los competidores a una tasa reducida.
Si bien se desconoce el precio exacto al que se vende cada crédito, Automotive News estima que Tesla gana aproximadamente $3,500 dólares por cada crédito. Esto significa que un fabricante de automóviles que no cumple puede ahorrar alrededor de $1,500 dólares por crédito (30 %) comprándolos directamente de Tesla en lugar de pagar una multa reglamentaria.
Una mina de oro para Tesla
Si los fabricantes de automóviles comienzan a ver un sesgo en las compras de vehículos eléctricos debido al crédito fiscal de vehículos eléctricos como se predijo, Tesla se encuentra en una mina de oro de créditos acumulados. En 2020, California informó que Tesla tenía 752,445 créditos, una cantidad que vale alrededor de $2,600 millones si cada crédito se vende a $3,500 dólares.
El fabricante de automóviles con la siguiente mayor cantidad de crédito es Toyota con 187,045, seguido de General Motors con 184,204. Sin embargo, la ventana de compra puede ser pequeña, ya que muchos fabricantes y productores de baterías ya están planeando instalaciones en los EE.UU. con fechas de lanzamiento proyectadas para 2025 o antes.
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