Aparcamiento en espiga: cómo se hace y cuándo usarlo

Conducir un vehículo puede parecer sencillo, pero hay ciertas situaciones que son más difíciles para algunas personas. El aparcamiento es una de las tareas que muchas personas se complican al estacionar el auto, sobre todo por no calcular bien el espacio.

Existen diferentes tipos de aparcamiento, horizontal, vertical y el diagonal, también llamado espiga. Este tipo de posición en los estacionamientos es el menos común en comparación con los otros, aunque expertos señalan que puede ahorrar hasta un 10 por ciento de espacio. Este tipo de maniobra puede ser complicado en algunas ocasiones, por lo que a continuación mostraremos cómo aparcar en diagonal o espiga.

Aparcamiento en diagonal o espiga es mucho más seguro

Las posiciones para estacionar un auto en diagonal o espiga, se ven en muchos estacionamientos de todo el mundo. Sin embargo, es el menos común entre los verticales y horizontales, dependiendo de cómo se vea. Esta modalidad tiene una técnica parecida para estacionar que los otros, pero a veces, las personas no lo saben medir.

Aunque es un estilo de aparcamiento que se ha intentado poner más en práctica en muchos lugares, sobre todo públicos, no sigue siendo la más común. Los expertos señalan que esta maniobra es más segura, cómoda y ahorra un 10 por ciento de espacio en los estacionamientos.

Para encontrar este tipo de estacionamientos. Normalmente, se encuentra indicado con líneas inclinadas a 60 grados en el asfalto. También se pueden conseguir indicaciones en carteles del tipo de aparcamiento que existe en el lugar.

Pasos para estacionar en diagonal o espiga

Ubica el espacio de estacionamiento: Antes de intentar estacionar en diagonal, asegúrate de que el espacio sea lo suficientemente grande como para acomodar tu vehículo. Mira el tamaño del espacio y compáralo con las dimensiones de tu auto.

Alinéate con el espacio: Acércate al espacio de estacionamiento de una manera paralela al mismo. Mantén una distancia prudente, aproximadamente a un metro y medio del vehículo que esté frente a ti.

Señaliza y revisa: Enciende las luces intermitentes de tu vehículo para indicar tu intención de estacionar. Revisa cuidadosamente tus espejos y punto ciego para asegurarte de que no haya ningún obstáculo o vehículo que pueda interferir con tu maniobra.

Comienza a girar: Gira suavemente el volante en la dirección en la que deseas que el vehículo apunte, es decir, hacia la diagonal. Mantén una velocidad lenta y constante durante todo el proceso.

Continúa girando y ajusta: A medida que el vehículo comienza a girar, sigue girando el volante para alinear tu auto con el espacio de estacionamiento. Ajusta la posición del vehículo según sea necesario, hasta que quede perfectamente colocado en diagonal.

Completa el estacionamiento: Una vez que tu vehículo esté en la posición deseada, finaliza el estacionamiento aplicando el freno de mano y apagando las luces intermitentes.

Recuerda que la práctica es clave para dominar el estacionamiento en diagonal. Tómate tu tiempo, mantén la calma y sé consciente de tu entorno. Con un poco de paciencia y habilidad, podrás estacionar tu auto de manera eficiente y segura en espacios estrechos. Recuerda evitar tener autos atrás esperando que termines la maniobra, esto puede causar presión y un posible accidente.

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