¿Es necesaria una autorización para tramitar la licencia?
Si eres adolescente o estás cerca de cumplir la mayoría de edad, necesitas una autorización de padre o tutor legal para solicitar la licencia.
Los menores de edad en Estados Unidos deben tener el consentimiento de padres o tutores legales para tramitar la licencia de conducir. Crédito: antoniodiaz | Shutterstock
En muchos estados de Estados Unidos, los adolescentes que desean obtener su primera licencia de conducir deben contar con la aprobación de sus padres o tutores legales. Esta autorización no es un simple requisito administrativo: es un paso legal que implica responsabilidad compartida y cumplimiento de ciertas condiciones. Aquí te explicamos por qué este permiso es obligatorio, cómo se otorga y qué consecuencias tiene para los padres y el menor.
¿Por qué se necesita el permiso de los padres?
Cuando un menor de edad (generalmente entre los 15 y 17 años) solicita una licencia de conducir o un permiso de aprendizaje, las leyes estatales exigen que un adulto responsable—padre, madre o tutor legal—autorice formalmente el inicio del trámite. La razón principal es que los menores no tienen plena capacidad legal para asumir ciertas obligaciones, como responder por daños en caso de accidentes.
La firma del padre o tutor en el formulario de solicitud funciona como una declaración de consentimiento y, en muchos estados, también como un compromiso legal de responsabilidad civil por la conducta del menor al volante.
¿En qué consiste esta autorización?
La autorización parental suele presentarse mediante un formulario oficial proporcionado por el Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) del estado correspondiente. Este documento incluye:
- Datos del menor solicitante.
- Información del padre o tutor legal.
- Firma del adulto autorizando el trámite.
- En algunos casos, certificación ante notario público.
En estados como Florida, Texas, Georgia o California, este paso es obligatorio para obtener tanto el permiso de aprendizaje (learner’s permit) como la licencia intermedia dentro del sistema de licencias graduales.
¿Qué implica para los padres firmar esta autorización?
Al firmar, el adulto asume ciertas responsabilidades, entre ellas:
- Supervisar la práctica de manejo del menor, especialmente durante el periodo con permiso de aprendizaje.
- Ser responsable económicamente por daños causados por el menor mientras conduce.
- Tener la posibilidad de revocar la autorización en cualquier momento antes de que el menor cumpla la mayoría de edad.
En muchos estados, si el adulto retira su consentimiento por escrito, el DMV puede suspender la licencia del menor hasta que se cumplan los 18 años o hasta que otro adulto asuma la responsabilidad legal.
¿Qué pasa cuando el adolescente cumple 18 años?
Una vez que el joven alcanza la mayoría de edad, ya no necesita la autorización de un padre o tutor para renovar o solicitar una licencia. A partir de ese momento, asume toda la responsabilidad legal y financiera como cualquier otro conductor adulto. En ese momento, el DMV le puede aplicar el examen de manejo para concederle la licencia de conducir completa, libre de las restricciones que se aplican a los adolescentes.
Para los adolescentes, sacar la licencia de conducir es un paso importante hacia la independencia, pero requiere el respaldo legal de sus padres o tutores. Esta autorización no solo permite iniciar el trámite, sino que también establece un marco de responsabilidad compartida. Por eso, es fundamental que tanto el menor como el adulto comprendan bien qué implica firmar ese permiso antes de comenzar el proceso.
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