Chevrolet Corvette SS 1957 se vende por $7.7 millones y marca un hito
El Chevrolet Corvette SS 1957 no es solo el Corvette más caro jamás vendido, sino también un símbolo de innovación, desafío y pasión por la competición.
Chevrolet Corvette SS 1957. Crédito: RM Sothebys | Cortesía
El mundo del automovilismo y las subastas de vehículos clásicos ha sido testigo de un acontecimiento histórico: un Chevrolet Corvette SS de 1957 ha sido vendido por la asombrosa cifra de 7,7 millones de dólares, estableciendo un nuevo récord para la marca.
Este emblemático modelo, conocido internamente como Project XP-64, no solo representa un hito en términos de valor monetario, sino que también encarna una rica historia de innovación y pasión por la competición.
El nacimiento de una leyenda
En la década de 1950, el Chevrolet Corvette aún no había alcanzado el estatus de ícono deportivo que posee hoy en día. Fue gracias a la visión y determinación de Zora Arkus-Duntov, ingeniero y piloto de carreras conocido como el “padre del Corvette”, que el modelo comenzó su transformación. Arkus-Duntov, con experiencia en competencias como las 24 Horas de Le Mans, se propuso crear un vehículo que pudiera competir al más alto nivel en las pistas internacionales.
El resultado de este esfuerzo fue el Corvette SS 1957, un coche de carreras diseñado desde cero con un enfoque en el rendimiento y la innovación. El equipo de Arkus-Duntov reinventó el Corvette de primera generación, dotándolo de un chasis tubular ligero, una carrocería aerodinámica fabricada en magnesio y un motor V8 de 4.6 litros con inyección de combustible Ramjet, capaz de producir 300 caballos de fuerza.
Estas características, junto con un peso en vacío de aproximadamente 840 kg, casi 400 kg menos que la versión de serie, hicieron del Corvette SS un vehículo extremadamente ligero y potente para su época.
Un debut desafiante en las 12 Horas de Sebring
El Corvette SS hizo su debut en competición en las 12 Horas de Sebring de 1957, una de las pruebas de resistencia más prestigiosas de Estados Unidos. Conducido por los pilotos John Fitch y Piero Taruffi, el vehículo mostró un rendimiento prometedor durante las fases iniciales de la carrera.
Sin embargo, problemas mecánicos, incluyendo fallas en la suspensión trasera y los frenos, obligaron al equipo a retirarse después de completar solo 23 vueltas. A pesar de este contratiempo, la participación del Corvette SS en Sebring dejó una impresión duradera y demostró el potencial del modelo en el mundo de las carreras.
El legado interrumpido y la rareza del modelo
Tras la carrera en Sebring, el futuro del Corvette SS se vio afectado por decisiones externas. En junio de 1957, la Asociación de Fabricantes de Automóviles (AMA) impuso una prohibición a la participación en competiciones de fábrica, lo que llevó a General Motors a retirar su apoyo oficial a los programas de carreras. Como resultado, el Corvette SS no tuvo la oportunidad de demostrar plenamente su potencial en las pistas internacionales.
Solo se construyeron dos unidades del Corvette SS: un prototipo de pruebas, conocido como “La Mula”, y el coche de competición que recientemente fue subastado. Esta exclusividad, junto con su historia y especificaciones técnicas, ha convertido al Corvette SS en una de las piezas más codiciadas por coleccionistas y entusiastas del automovilismo.
La subasta récord: un testimonio del valor histórico
La reciente venta del Corvette SS 1957 por 7,7 millones de dólares en una subasta organizada por RM Sotheby’s en Miami ha establecido un nuevo récord para la marca. Este precio supera significativamente el récord anterior, establecido por un Corvette C2 de 1967 con motor L88, que se vendió por 3,85 millones de dólares en agosto de 2024.
La cifra alcanzada refleja no solo la rareza del vehículo, sino también su importancia en la historia del automovilismo y su influencia en el desarrollo de futuros modelos de Corvette. El Corvette SS es considerado el precursor de todas las variantes de competición modernas del “auto deportivo de América“, y su diseño y tecnología sentaron las bases para el éxito de la marca en las décadas siguientes.
Un futuro brillante para el Corvette SS
Aunque la identidad del nuevo propietario del Corvette SS 1957 no ha sido revelada, se espera que este vehículo histórico sea exhibido en eventos de automovilismo clásico y competencias de autos históricos. Su presencia en estas plataformas permitirá a los entusiastas y al público en general apreciar de cerca una pieza fundamental de la ingeniería automotriz estadounidense y comprender el legado que ha dejado en la evolución de los coches deportivos.
La venta récord del Corvette SS 1957 no solo destaca el valor monetario de este vehículo único, sino que también resalta la pasión y el interés continuo por los automóviles clásicos que han dejado una marca indeleble en la historia del motor. Este hito sirve como recordatorio de la importancia de preservar y celebrar estos tesoros automovilísticos para las generaciones futuras.
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