¿Gas o hidráulico? ¿Qué tipo de amortiguadores conviene usar?
Los amortiguadores son elementos que ayudan al auto a tener una mejor estabilización en todos los terrenos, pero entre ellos hay varios tipos que depende de la forma de manejo, puede ser uno mejor o peor.
Los amortiguadores ayudan a mejorar la estabilidad del auto. Crédito: Palitsyn Evgenii | Shutterstock
Al momento de cambiar los amortiguadores de los autos, hay una duda que puede surgir a algunos conductores. Aunque el auto necesita usar la medida y tipo correcto, puede variar en su sistema de amortiguación entre gas o hidráulico. Esta elección puede cambiar un poco el estilo de manejo del carro.
Ambos tipos de amortiguadores tienen sus propias características y ventajas únicas, y comprender las diferencias entre ellos es esencial para tomar una decisión informada. En este artículo, mostraremos las ventajas clave entre los amortiguadores de gas y los hidráulicos, así como los factores a considerar al decidir qué tipo es mejor para su vehículo.
Diferencias entre amortiguadores a gas e hidráulicos
Amortiguadores de gas
Los amortiguadores de gas, utilizan gas nitrógeno para proporcionar fuerza de amortiguación. Estos amortiguadores cuentan con un pistón que se mueve a través de un cilindro lleno de fluido hidráulico y gas nitrógeno.
La carga de gas dentro del amortiguador ayuda a reducir la formación de espuma y la aireación del fluido hidráulico, que pueden ocurrir durante un uso intensivo o en condiciones extremas. Esto da como resultado un rendimiento de amortiguación constante y una mayor durabilidad.
Ventajas
Una de las principales ventajas de los amortiguadores de gas es su capacidad para resistir la decoloración. Esto es la reducción de la fuerza de amortiguación que puede ocurrir cuando el amortiguador se calienta con un uso intensivo. Los amortiguadores de gas suelen ser los preferidos para vehículos todoterreno, camiones y automóviles de alto rendimiento, donde el rendimiento constante de la amortiguación es crucial.
Amortiguadores hidráulicos
Los amortiguadores hidráulicos utilizan fluido hidráulico para proporcionar fuerza de amortiguación. Estos amortiguadores dependen de la resistencia del fluido hidráulico para absorber y disipar la energía de los movimientos de la suspensión del vehículo.
Los amortiguadores hidráulicos son conocidos por su rendimiento de amortiguación suave y controlado. Su composición los hace adecuados para una amplia gama de vehículos, incluidos turismos, motocicletas y camiones ligeros.
Ventajas
Una de las ventajas clave de los amortiguadores hidráulicos es su capacidad para proporcionar una calidad de conducción cómoda al amortiguar eficazmente las vibraciones y los impactos de superficies irregulares de la carretera. También son conocidos por su simplicidad y rentabilidad, lo que los convierte en una opción popular para muchas aplicaciones de vehículos.
¿Qué amortiguador elegir?
Al decidir entre amortiguadores de gas e hidráulicos, hay varios factores a considerar. El uso previsto del vehículo, las condiciones de conducción y las características de conducción deseadas influyen a la hora de determinar qué tipo de amortiguador es el más adecuado para la aplicación.
Los entusiastas del todoterreno y los conductores orientados al rendimiento pueden inclinarse por los amortiguadores de gas por su resistencia superior a la decoloración, mientras que los conductores cotidianos pueden apreciar la conducción suave y cómoda que proporcionan los amortiguadores hidráulicos.
Cuando se maneja con amortiguadores a gas, puede sentirse un manejo más duro cuando el auto pasa por baches o desniveles en la vía. Mientras, los hidráulicos, al tener aceite en su sistema, hace que al pasar por curvas o inclinaciones, el auto caiga más suave sin sentir tanto el golpe. La elección del amortiguador será esencial porque determinará tu estilo de manejo.
Ambos tipos tienen sus propios puntos fuertes y son adecuados para diferentes aplicaciones. Al comprender las diferencias clave y considerar el uso previsto del vehículo, los conductores pueden tomar una decisión informada al seleccionar el tipo correcto de amortiguadores para sus vehículos.
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