La razón por la que los convertidores catalíticos son tan buscados en el mercado de piezas robadas
Los convertidores catalíticos en los autos son elementos que brindan un mejor funcionamiento a los vehículos y ayudan a minimazar las emisiones de los motores a gasolina. Sin embargo, los metales valiosos en su interior han convertido a estas piezas en objeto de los ladrones para el mercado negro
El convertidor catalítico de los automóviles juega un papel esencial en el funcionamiento y es de suma importancia para el desempeño correcto de cualquier motor, así como para el cuidado ambiental.
El convertidor catalítico de tu auto forma parte del sistema de escape del vehículo y su principal función es la de reducir la contaminación producida al expulsar los gases de escape al exterior. De esta manera se disminuye la repercusión ambiental de las emisiones contaminantes producidas por los vehículos a motor. Si el catalizador deja de funcionar o no funciona de manera correcta no podrás pasar el smog test y tu auto estaría lanzando emisiones de gases mayor de lo normal.
¿Dónde se encuentra el convertidor catalítico?
El convertidor catalítico se encuentra debajo de tu auto conectado al tubo de escape con pernos. Es un elemento vital del sistema de escape de tu vehículo porque reduce las emisiones de compuestos nocivos que se encuentran en el escape del automóvil.
Todos los automóviles fabricados después de 1974 deben tener convertidores catalíticos para convertir estos contaminantes en compuestos menos dañinos antes de salir del sistema de escape y todos están por debajo del auto.
¿Por qué los ladrones roban los convertidores catalíticos?
Los convertidores catalíticos están conectados al sistema de escape del auto. Su apariencia es la de un pequeño silenciador que se encuentra en la parte inferior del coche. Los ladrones están interesados en estos porque contienen metales valiosos que ayudan a reducir los gases peligrosos para el medio ambiente que produce un motor y cuyo valor ha subido en poco tiempo.
Una onza de rodio, uno de los metales en esa pieza automotriz, cuesta unos $13,000 dólares y en marzo de 2021 llegó a valer $27,000 dólares. El paladio, otro componente, se vende a $2,000 dólares por onza y el año pasado estaba en casi $3,000 dólares. Mientras que el platino cuesta $1,000 dólares por onza, esto es unos $266 dólares menos que durante la primavera de 2021.
Las recicladoras pagan a los ladrones entre $50 y $250 dólares por pieza, que cortan en cuestión de segundos. El que ahora estén robando en volúmenes más grandes ha incrementado sus ganancias. También provocó que la pieza se venda por entre $800 y $1,200 dólares en el mercado y que suban las pólizas de seguro.
Como recomendación, procura estacionar tu automóvil en un lugar cerrado y seguro, evita dejarlo en la calle y, si no hay otra opción, estaciónalo en un lugar iluminado, cerca de cámaras de vigilancia, activa la alarma, y haz todo lo posible por que tu vehículo no sea víctima de estos robos.
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