5 filtros que debes cambiar cada tanto para mantener bien tu carro
Debes seguir las recomendaciones del fabricante respecto a los tiempos de reemplazo de los filtros. Utilizar repuestos de calidad garantiza un óptimo funcionamiento del motor y prolonga la vida útil del vehículo.
La cantidad y el tipo de filtros que tiene el motor de un automóvil pueden variar según el modelo y el fabricante del vehículo. Crédito: Shutterstock
Mantener bien tu automóvil no sólo consiste en cargar combustible, cambiar el aceite del motor y revisar las llantas cada tanto. También debes revisar otros componentes que, aunque parezcan menores, pueden afectar en gran medida el desempeño de tu carro. Los filtros son un buen ejemplo de esos elementos que muchas veces subestimamos y debemos atender.
La cantidad y el tipo de filtros que tiene el motor de un automóvil pueden variar según el modelo y el fabricante del vehículo. Sin embargo, en general, un motor de automóvil puede tener varios tipos de filtros para distintas funciones.
Los filtros más comunes que se encuentran en el motor de un carro son los siguientes.
5 filtros que debes cambiar cada tanto para mantener bien tu carro
Un ejemplo de esto son los diferentes filtros que tiene un carro, y los cuales deben ser revisados y reemplazados a tiempo. Existen cinco filtros esenciales para que el coche no sufra desgastes prematuros o graves averías y aquí te decimos cuáles son:
Filtro de aceite
Este filtro se encarga de que ninguna impureza termine dañando los componentes internos del motor a través del aceite. Los filtros de aceite están hechos de simple papel, pero consiguen atrapar en su interior pequeñas partículas e impurezas contenidas en el interior del motor.
Es recomendable reemplazar este filtro cada que cambiamos el aceite del coche, y nunca deberían reutilizarse, pues además su costo es muy barato.
Filtro de combustible
Los filtros de combustible pueden durar mucho tiempo en buen estado en un coche de gasolina, sin embargo, si cuentas con un vehículo diésel, deberás poner atención especial en el mantenimiento del filtro. En un vehículo diésel, el sistema de inyección trabaja a enormes presiones y con tolerancias micrométricas: cualquier impureza o agente externo en el combustible podría provocar carísimas averías, especialmente en los inyectores o en la bomba de combustible.
Los filtros de combustible también son muy baratos, y algunas versiones más modernas cuentan con un pequeño receptáculo para separar el agua del combustible y entrada para un sensor el cual indica si hay agua atrapada en su interior.
Filtro de aire
Este filtro se encarga de purificar el aire que ingresa al sistema de admisión del motor, evitando que partículas de polvo y suciedad lleguen a los cilindros y dañen las partes internas del motor. Su función es muy importante, ya que evita que se cuelen elementos externos en la admisión del coche y pasen a la cámara de combustión.
Otra de las razones por la cual es importante reemplazarlo de manera oportuna es porque, si no funciona correctamente, el auto consumirá más combustible. ¿Por qué? Porque debe hacer más esfuerzo para “respirar”, y lo compensa inyectando más combustible.
El periodo de reemplazo de estos filtros de aire varía dependiendo cada fabricante, sin embargo, lo recomendable es cambiarlo por lo menos cada año, sobre todo si vives en una zona con mucho polvo o tierra suelta.
Filtro del habitáculo o filtro de “polen”
El filtro de habitáculo o filtro de polen se encuentra en el sistema de ventilación del habitáculo del vehículo y tiene la función de purificar el aire que entra en el interior del automóvil, manteniendo limpio y libre de partículas el aire que respiran los ocupantes.
Es, quizá, uno de los filtros más descuidados, pero su función es muy importante porque evita que se cuelen impurezas, olores y residuos al sistema de climatización de tu carro.
Si notas que tu vehículo huele mal cuando arrancas el aire acondicionado, es muy posible que tengas que cambiar el filtro de polen. Estos filtros son de papel y son relativamente finos, lo que provoca que en poco tiempo se ensucien y deban ser reemplazados, sobre todo por salud al interior de tu auto.
Filtro de recirculación de gases de escape (EGR)
Algunos vehículos equipados con sistema de recirculación de gases de escape pueden tener un filtro que ayuda a mantener limpio este sistema y reducir la acumulación de carbonilla.
El filtro de recirculación de gases de escape (EGR, por sus siglas en inglés: Exhaust Gas Recirculation) es un componente que forma parte del sistema de emisiones de algunos vehículos modernos, especialmente los que cumplen con estándares de emisiones más estrictos. Su función principal es reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) producidas por el motor.
Para mantener el EGR funcionando correctamente y evitar problemas, es fundamental seguir las recomendaciones del fabricante del vehículo en cuanto a su mantenimiento y reemplazo. Algunos de los problemas comunes asociados con el EGR pueden incluir la obstrucción del sistema debido a la carbonilla, mal funcionamiento de la válvula EGR o fallas electrónicas.
Si observas problemas con el sistema EGR, es recomendable llevar el vehículo a un taller mecánico calificado para su inspección y reparación adecuada. La limpieza periódica del sistema EGR pueden ayudar a mantener el rendimiento del motor y reducir las emisiones contaminantes. Eso evita, además, problemas en la inspección de tu vehículo.
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