5 SUV’S usados que no lograron acreditar las pruebas de choque de la NHTSA

Hay un elemento detrás de la historia de cada SUV usado que debería preocupar a los posibles compradores de este tipo de vehículos, y ese es su confiabilidad. Si bien eso puede ser intimidante, al menos puedes tener la tranquilidad de saber qué vehículos son seguros realizando un poco de investigación mientras eliges qué SUV usado comprar.

Para facilitarte un poco el trabajo, aquí te diremos cuáles son los cinco SUV´s usados con serios problemas de seguridad. Probablemente encontrarás muchos de estos modelos populares en tu concesionario local de autos usados, pero no te dejes llevar por precios atractivos si la seguridad de tu familia es tu máxima prioridad. Estos vehículos obtuvieron puntuaciones inferiores a la media en la prueba de choque de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA).

5. Ford Escape 2011-2012

Los compradores de autos usados ​​se enfrentan a un enigma. Tienen que pagar por un vehículo moderno o comprar un modelo que parece de la edad de piedra. El Ford Escape 2011-2012 encaja en la última categoría.

Puedes comprar este SUV usado por menos de $10,000 dólares, pero tendrás que moderar tus expectativas. El Ford Escape 2011-2012 carece de características modernas en la mayoría de los niveles de equipamiento, aunque los modelos completamente cargados al menos tienen un sistema de información y entretenimiento. Pero su terrible calificación de prueba de choque debería preocuparte más.

La NHTSA otorgó al Ford Escape 2011-2012 una calificación de seguridad general de tres estrellas. A diferencia de la mayoría de los otros modelos, este SUV compacto usado no posee cualidades redentoras. Tiene puntuaciones de tres estrellas por debajo del estándar en todas las categorías importantes: choque frontal, choque lateral y vuelco. En comparación, la mayoría de los vehículos nuevos obtienen una calificación general de cuatro o cinco estrellas.

4. Jeep Grand Cherokee 2014-2020

El Grand Cherokee de cuarta generación es un caso extraño, ya que su clasificación de seguridad depende de su configuración. Los compradores de autos usados ​​deben sentirse cómodos comprando una versión 4 × 4 de este SUV mediano. Sin embargo, los modelos de tracción trasera presentan una desventaja significativa, además de una peor capacidad todoterreno .

Según la NHTSA, los modelos Jeep Grand Cherokee 4×2 2014-2020 tienen un mayor riesgo de vuelco que las versiones 4×4. La organización otorgó a estas versiones una puntuación de tres estrellas (20,40% de riesgo de vuelco) en esta categoría. Mientras tanto, el Grand Cherokee 4×4 obtuvo cuatro estrellas (riesgo de vuelco del 16,90%).

La baja puntuación de vuelco afectó drásticamente la calificación de seguridad general del Grand Cherokee 4×2. Bajó de cinco estrellas en modelos 4×4 a cuatro estrellas. Recientemente, FCA reveló su nueva Jeep Grand Cherokee 2021, sin embargo, los compradores deben tener cuidado con la configuración de Grand Cherokee que compran.

3. Volkswagen Tiguan 2013-2017

Este SUV compacto usado de lujo presenta un perfil atractivo y sofisticado. Pero si bien este aspecto impresionará a tus amigos, será un desafío conducir con tranquilidad.

Su calificación de seguridad general de cuatro estrellas no grita “peligro”. Sin embargo, el puntaje de choque frontal de tres estrellas del VW Tiguan da muchos motivos de preocupación. La NHTSA descubrió que el lado del pasajero del SUV era especialmente susceptible a daños, una revelación alarmante para cualquier persona con una familia. Además, la organización solo otorgó al Volkswagen Tiguan 2013-2017 una calificación de cuatro estrellas en la prueba de choque de vuelco (riesgo de 18,50%).

2. Toyota RAV4 2011

Al igual que el Ford Escape 2011-2012, el puntaje de seguridad de este SUV compacto usado hace que los compradores miren hacia otro lado con disgusto. La NHTSA otorgó al Toyota RAV4 2011 una calificación de seguridad general similar de tres estrellas. El RAV4 2011 solo obtuvo tres estrellas en la prueba de choque frontal. Sin embargo, le fue un poco mejor en las pruebas de choque lateral y de vuelco que su rival Ford.

Afortunadamente, no tienes que evitar todos los modelos RAV4 más antiguos, ya que la falla del modelo 2011 fue un destello en el radar. La NHTSA le dio al resto de la tercera generación de Toyota RAV4 (2005-2012) mejores puntajes en la prueba de choque frontal. Además, Toyota rediseñó su SUV compacto para el año modelo 2013. Esta actualización solucionó algunos de los problemas de seguridad del modelo, pero el RAV4 perdió su personalidad única en el proceso.

1. Lincoln Navigator 2012-2014

Comprar un Lincoln de casi diez años es una forma popular de conseguir un vehículo de lujo por poco dinero. Sin embargo, este SUV usado de tres filas sufre problemas similares a los del Jeep Grand Cherokee 2014-2020.

La NHTSA otorgó a todos los modelos Lincoln Navigator 2012-2014 una calificación general de seguridad de cuatro estrellas. Sin embargo, la organización descubrió que la versión 4×2 tiene un mayor riesgo de vuelco (21.20%) que la 4×4 (19.80%). La aparentemente pequeña diferencia en el porcentaje cambió drásticamente la calificación de la NHTSA en esta categoría, bajándola de cuatro estrellas a tres.

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