El último superdeportivo eléctrico basado en el Chevy Corvette podría llegar el próximo año

El presidente de General Motors, Mark Reuss, tuvo mucho que decir el jueves sobre el progreso de la compañía hacia la electrificación en su día de inversores. Hubo la habitual lista de objetivos elevados y declaraciones optimistas, pero también nos enteramos de algo que no sabíamos antes: Un superdeportivo totalmente eléctrico basado en el Chevrolet Corvette llegará tan pronto como el próximo año. Esto se sumará a la cúspide de las prestaciones del Corvette: el tan esperado “Zora”, que definitivamente está en marcha. Según Reuss, serán dos vehículos diferentes.

Un Corvette híbrido y otro totalmente eléctrico

Para ser claros, sabíamos que un Corvette totalmente eléctrico iba a llegar. El propio Reuss lo dijo hace siete meses en un post de LinkedIn. “Además del nuevo y sorprendente Chevrolet Corvette Z06 y de otras variantes con motor de gasolina que están por llegar, ofreceremos un Corvette electrificado y otro totalmente eléctrico, basado en Ultium, en el futuro“. Lo que no sabíamos antes era lo pronto que iba a llegar.

Según The Associated Press, Reuss dijo que un deportivo basado en el Corvette llegaría el año que viene, y añadió: “Esto volverá a marcar el estándar del mundo en cuanto a prestaciones”.

El nuevo auto podría no ser un Corvette

Hay cierta confusión sobre lo que podría ser este deportivo eléctrico basado en el C8. En la llamada de GM, Reuss no se refirió al vehículo específicamente como un Corvette, sino que dijo que utilizaría la arquitectura del C8. Sin embargo, sería inusual que GM creara un deportivo que no se llamara Corvette. Tal vez hacer un coche eléctrico utilizando los fundamentos del C8 implicaba cambiarlo tanto que el fabricante de automóviles ya no creía que era adecuado llamarlo el coche deportivo de América. Pero esto es sólo una especulación.

¿Cómo sería un vehículo eléctrico basado en la arquitectura del C8?

Diferentes empresas tienen diferentes ideas sobre cómo hacer un buen deportivo eléctrico. Rimac utiliza una batería que ocupa el espacio donde estaría el motor en un coche con motor central, y apila las celdas en el túnel central estructural del vehículo. Por otro lado, Ferrari tiene patentes que muestran baterías justo en la parte trasera del coche. Así es como lo hizo el Tesla Roadster original.

Parece probable que un deportivo eléctrico basado en el C8 adopte el enfoque de Rimac. Cuando se detalle formalmente el sustituto del Grand Sport híbrido, es probable que veamos las celdas de la batería en el túnel estructural muy alto del C8. GM ya apila las celdas en una estructura de túnel en el Cadillac Celestiq, también. Sin motor ni transmisión, sin embargo, habría mucho espacio para apilar las baterías en la parte trasera. Además, la colocación del motor delantero del Corvette híbrido de base se trasladaría bien a un modelo totalmente eléctrico. Sólo habría que añadir otro motor en la parte trasera, y GM tiene una gran caja de piezas para elegir en ese aspecto.

¿Tendrá el ión-litio suficiente densidad de energía para que todo funcione?

Los compradores de Corvette probablemente no verían con buenos ojos un ‘Vette eléctrico de corto alcance. El C8 es bastante grande para lo que es, seguro, pero no es un Hummer EV con espacio para el colchón de ácido de 200 kWh y 3,000 libras. GM tiene muchas patentes de baterías de estado sólido, pero es probable que falten varios años para su producción.

Al menos sabemos que tendremos respuestas a muchas de estas preguntas en los próximos meses.

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