Por qué el auto se va hacia un lado cuando frena: qué puede estar pasando
Los frenos defectuosos pueden causar una condición de freno de tracción y hacer que tu automóvil se desplace hacia un lado al frenar.
El sistema de frenado del auto debe siempre estar en óptimas condiciones para seguridad del conductor y de los pasajeros. Crédito: Shutterstock
Existen diferentes problemas mecánicos que tu auto experimenta a lo largo del tiempo, y uno de los más comunes, pero que no debes dejar pasar por alto es cuando tu automóvil tira hacia un lado al frenar. Lo más probable es que la falla esté en el sistema de frenos, y existen diversos problemas que pueden causar esto.
Sin embargo, en ocasiones la falla no es en absoluto en el sistema de frenado, también puede ser causado por una llanta defectuosa o componentes de suspensión sueltos o desgastados. Cualquiera que sea la razón, conducir con un freno de tracción es peligroso, así que aquí te diremos cómo puedes localizar la fuente del problema a través de una serie de inspecciones y diagnósticos rápidos.
Por qué el auto se va hacia un lado cuando frena
Para comenzar, deberás identificar si el problema está en las ruedas delanteras o traseras. Por lo general, cuando el problema proviene de uno de los conjuntos de freno delantero, sentirás un fuerte tirón en el volante al aplicar los frenos.
Sin embargo, cuando el problema proviene de uno de los conjuntos de freno trasero, es posible que no notes un tirón a menos que frenes con fuerza. Frenar con fuerza hará que uno de los neumáticos patine y chille porque se bloqueará. Además, será notorio un desgaste inusual de alguno de los neumáticos, lo que hará fácil saber dónde está el problema.
¿Cómo puedes detectar posibles problemas y cómo solucionarlos?
1. Balatas de frenado contaminadas
Las pastillas de freno o forros de zapata de freno contaminadas con líquido o grasa impedirán que el conjunto del freno funcione correctamente en ese lado del sistema. Verifica los conjuntos de frenos delanteros o traseros sospechosos levantando y apoyando de manera segura el vehículo en soportes de gato.
Posteriormente, retira el conjunto rueda-neumático y revisa la pastilla de freno y el rotor (frenos delanteros), o las zapatas y la superficie del tambor (frenos traseros), para ver si hay una capa de grasa o aceite o alguna otra materia extraña. Es posible que debas encontrar la fuente de la fuga o la contaminación. Una vez detectado el problema, haz las reparaciones y reemplaza las almohadillas o balatas según sea necesario.
2. Desgaste desigual de los frenos
Pastillas de freno y rotores deben desgastarse gradualmente y al mismo ritmo en cada lado, al igual que las zapatas de freno y los tambores deben frenar gradualmente y al mismo ritmo. Sin embargo, los problemas del sistema de frenos pueden hacer que el conjunto de freno de una rueda sufra un desgaste excesivo en comparación con el conjunto de la rueda opuesta, lo que provoca una condición de freno de tracción.
Inspecciona los conjuntos de ruedas delanteras o traseras en busca de un desgaste desigual. El desgaste excesivo de una pastilla de freno o un rotor en un lado puede ser una señal de problemas en el sistema de frenos que debes investigar más a fondo. Posteriormente, verifica el funcionamiento de los frenos para encontrar y corregir el problema.
Si tienes un desgaste desigual de las pastillas de freno, zapatas, rotores o tambores, verifica que no haya un pistón de la pinza atascado, un pistón de cilindro de rueda congelado, hardware de montaje suelto o atascado, un mecanismo de operación suelto o atascado, y que haya correcta lubricación del pasador y la corredera de la pinza.
3. Fuga de líquido de frenos
A pistón de la pinza con fugas o cilindro de rueda evitará que el conjunto de freno funcione correctamente y provocará una condición de freno de tracción.
4. Ajustador del freno trasero
Un conjunto de freno de rueda trasera también puede fallar cuando el ajustador del freno se congela o falla. Los ajustadores de la zapata de freno deben mantener la distancia correcta entre el forro de la zapata de freno y el tambor a medida que se desgasta el forro. La mayoría de los vehículos utilizan un mecanismo de tipo rueda de estrella (tornillo) para el ajustador, mientras que algunos vehículos modernos pueden utilizar un mecanismo de tipo ajustador de pestillo.
Levanta y asegura con seguridad el vehículo en un soporte de gato. Retira la rueda y el tambor. Comprueba que el ajustador se mueva libremente. Consulta el manual de reparación de tu modelo de vehículo en particular para reparar o reemplazar el ajustador, si es necesario.
5. Neumáticos defectuosos
Si no has encontrado la fuente del tirón mientras frenas, una inspección rápida de los neumáticos puede ahorrarte tiempo y posiblemente dinero.
Pueden surgir problemas con las capas o correas que componen el cuerpo interno del neumático. Aunque es difícil saber si una llanta tiene problemas internos con sólo hacer una inspección visual, puedes cambiar una llanta delantera por una trasera y ver si el problema del freno de tracción desaparece. Si es así, lo más probable es que el problema esté en el neumático.
Frenos, neumáticos y suspensión
De esta manera puedes verificar los problemas más comunes que conducen a que tu automóvil realice frenado de tracción antes de decidir enviarlo al taller. Sin embargo, si pese a realizar las inspecciones anteriores no has tenido un buen diagnóstico, deberás buscar piezas de suspensión sueltas o gastadas que pueden estar causando el problema, como bujes dañados o piezas sueltas o desgastadas en un brazo de control inferior, barra de acoplamiento, rótula, barra de puntal o barra de torsión, según el modelo en particular.
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