El Rimac Nevera es ahora el vehículo eléctrico más rápido del mundo con una velocidad máxima de 258 MPH

Los vehículos eléctricos son conocidos por su aceleración que rompe la física, su respuesta instantánea al acelerador y su refinamiento silencioso. La velocidad máxima no es una de esas cosas, y los vehículos eléctricos son generalmente débiles a la hora de alcanzar la velocidad absoluta. Rimac ha redefinido el terreno con un asombroso récord de velocidad de 258 mph con un supercoche Nevera de producción.

Bugatti Chiron: el más rápido a combustión interna

La historia de la velocidad máxima es gloriosa y, de alguna manera, sigue vigente. La era de los coches de 200 mph comenzó con el Porsche 959 y el Ferrari F40 en los años 80, pasó rápidamente al McLaren F1 de 240 mph en 1994 y luego al Bugatti Veyron de 253 mph en 2005. Estamos en la era de los coches de 300 mph con el Bugatti Chiron, que es la cúspide de la velocidad máxima y la combustión interna. En cambio, la velocidad máxima de los vehículos eléctricos ha sido más difícil.

Rimac tiene un tiempo de aceleración récord

Diseñar un vehículo eléctrico para que vaya rápido, en lugar de acelerar, es un juego totalmente diferente. Mientras que la combustión interna genera más caballos a medida que aumentan las revoluciones, un motor eléctrico trifásico típico pierde potencia drásticamente en el extremo superior. De hecho, los motores eléctricos son los que más potencia generan a cero rpm, y el Nevera ostenta el título de coche de producción que más rápido acelera, con un tiempo de 8.6 segundos en el cuarto de milla.

Así que el problema es evidente. Porsche lo abordó con una caja de cambios de dos velocidades para el Taycan. Rimac utiliza una caja de cambios de una sola velocidad, lo que significa que los motores del Nevera están por encima de todo lo que se vende actualmente en términos de capacidad.

Velocidad máxima

El intento de récord tuvo lugar en Automotive Testing Papenburg, una instalación con un circuito ovalado con dos rectas de 3.5 kilómetros. Se parece a la propia pista de pruebas de Volkswagen en Ehra-Leissen y permitió al Nevera alcanzar su velocidad máxima simulada de 258 mph. Con los neumáticos Michelin Cup 2R montados, el Nevera se ha hecho con el título de vehículo eléctrico más rápido del mundo.

Es poco probable que esto provoque una guerra de velocidad máxima entre los fabricantes de vehículos eléctricos, pero es un logro impresionante que demuestra lo avanzado que es el diseño del motor de Rimac. Se trata de una capacidad sólo igualada por los coches de combustión interna más caros. Puede que aún no lo sepamos, pero este es un verdadero momento en la historia de los vehículos eléctricos.

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