Guardian invisible: funciones y beneficios del sistema ESP en tu auto
El sistema ESP de un auto brinda mayor estabilidad, por lo cual es importante mantenerlo siempre en óptimas condiciones por tu seguridad al conducir
El sistema ESP es obligatorio en todos los coches fabricados a partir de 2012. En algunos modelos se denomina también ESC (Control Electrónico de Estabilidad). Es una asistencia a la conducción que mejora la trayectoria y el agarre del vehículo. Te contamos cómo funciona el sistema ESP y qué debes hacer si falla.
¿Qué es el sistema ESP?
El sistema ESP es un dispositivo de seguridad instalado en todos los vehículos que sirve para estabilizar la trayectoria del coche y mejora su agarre, especialmente si el suelo está mojado y puede ser resbaladizo. Complementa otros tres sistemas electrónicos de seguridad:
- El ABS: un sistema de antibloqueo de frenos para situaciones de frenada de emergencia.
- El ASR o TCS (Traction Control System): que evita que las ruedas patinen cuando el vehículo frena.
- El EBD (Electronic Brakeforce Distribution), EBV o ECB: que distribuye la potencia de freno a cada rueda.
Por lo tanto, el sistema ESP funciona junto con los sistemas ABS, ASR y EBD. Cada uno desempeña una función clave si el vehículo frena y no puede controlar su propia trayectoria. Es lo que sucede sobre todo en asfalto mojado o con placas de hielo o cubierto de nieve. Gracias a estos dispositivos, se controla el derrape accidental y se reduce el riesgo de accidentes.
Funcionamiento y utilidad del sistema ESP
El sistema ESP utiliza diferentes sensores para su funcionamiento. Dichos sensores se instalan en determinados lugares del vehículo. Son los siguientes:
- Sensores de ruedas: que miden la velocidad de rotación de cada rueda.
- Sensor de velocidad: que calcula con precisión el impulso del vehículo.
- Sensor de ángulo del volante: utilizado para evaluar la entrada de la dirección.
- Sensor de aceleración transversal: que detecta cuándo la aceleración es perpendicular a la dirección de desplazamiento.
- Sensor de velocidad de guiñada: que interviene cuando la inclinación del vehículo se vuelve anormal y peligrosa.
Cuando los sensores detectan algún posible peligro, el sistema ESP se activa al instante y ejecuta un frenado inteligente que ayudará al vehículo a volver a la trayectoria correcta.
Este dispositivo sirve sobre todo para:
- Evitar un obstáculo: al detectar un volantazo, los sensores de las ruedas frenarán cada rueda de manera individual para ayudarte a recuperar la trayectoria.
- Corregir cualquier falta de agarre: activando el frenado de unas ruedas y no otras para equilibrar mejor el vehículo.
- Ayudar en curvas que se han tomado de forma demasiado brusca: incrementando el frenado de las ruedas situadas en el lado de la curva, para evitar que pierdas el control del vehículo.
¿Qué debes hacer si falla el sistema ESP?
Si el sistema ESP falla, no podrás corregir la pérdida de control del coche en un firme resbaladizo. Por tanto, la conducción se vuelve peligrosa. Cuando el ESP falla, se encenderá un testigo de color ámbar en el salpicadero. Deberás acudir a tu mecánico, que te explicará qué hay que hacer si se enciende un testigo en el salpicadero del coche.
No obstante, la luz del ESP también puede encenderse si desactivas el sistema. Aunque no es en absoluto aconsejable, el ESP puede desactivarse para arrancar en pendiente en una carretera nevada o para conducir en un circuito automovilístico participando en una carrera de coches, por ejemplo. Aparte de estas situaciones, el ESP debe estar siempre activado para tu seguridad.
Los motivos que hacen que se encienda el testigo del ABS pueden ser varios. Se recomienda acudir a un profesional. Ten en cuenta que cualquier luz de advertencia que se ilumine en el salpicadero del coche debe tomarse en serio, más aún si son los testigos de los sistemas de seguridad y las ayudas a la conducción, como el ABS.
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