Los riesgos de cerrar los espejos retrovisores al estacionar
Aunque algunos conductores repliegan los espejos retrovisores por precaución al estacionar en la calle, esta costumbre puede no tener el efecto deseado.
A cualquiera de nosotros, más de una vez, probablemente nos ha tocado aparcar el vehículo a la intemperie. Sin embargo, estacionar en la calle supone una serie de riesgos que van desde robo, hurto, rayones, choques y un sinfín de situaciones más. No obstante, cuando es la única opción, se suelen tomar algunas medidas de precaución.
Para evitar esos percances muchas veces se recurre a estrategias como: alarmas y uso de fundas. Asimismo, recoger los espejos retrovisores o laterales es una de esas prácticas comunes al estacionar en una vía permitida. Cerrar los espejos laterales del auto puede evitar que los mismos sufran algún golpe en calles estrechas, y permite dejar un margen mayor de maniobra a los demás. Sin embargo, esta práctica puede generar fallas de seguridad para tu automóvil, en este artículo te explicamos por qué.
Recoger los espejos retrovisores abre espacio a la imprudencia
Las calles donde está permitido estacionar muchas veces son espaciosas. Pero también hay algunas con dimensiones limitadas y ello puede propiciar que otros conductores con poca experiencia rocen tu carro y le causen algún daño o hasta romper un retrovisor.
Recoger los espejos retrovisores al estacionar en la calle, puede valorarse como una acción considerada hacia los demás. Sin embargo, no siempre es lo recomendable, pues también abre espacio a la imprudencia de los otros conductores.
Aunque los límites de velocidad están claramente señalados en las distintas vías, algunas personas no respetan esa norma y circulan más rápido de lo permitido. Cerrar los espejos retrovisores hará que esos conductores pasen cerca de tu auto confiado y a alta velocidad. En cambio, si los espejos están en su posición normal, se verán en la necesidad de bajar la velocidad, medir mejor el espacio y ser más cautelosos.
Conservar los retrovisores en buen estado
Cerrar los espejos retrovisores para evitar que sufran algún daño mientras el carro se encuentra estacionado, es una medida válida. No obstante, cuidarlos va más allá de replegarlos al aparcar. Para conservarlos en buen estado también se le pueden instalar protectores. Otra recomendación es no forzarlos más allá de sus límites si son eléctricos y realizarles mantenimiento regularmente con paños de microfibra.
Los retrovisores son una parte esencial del carro y elemento vital para los conductores. Su correcto uso evita accidentes, son prácticamente tus ojos auxiliares y otorgan más confianza al volante.
Estacionar en lugares permitidos
Recoger los espejos retrovisores al estacionar en la calle, para así evitar golpes o choques, no te mantendrá a salvo de ninguna multa si estás aparcado en una zona prohibida. Estacionar en espacios no autorizados de vías principales acarrea multas en casi todos los países. En este sentido, es importante hallar un lugar donde sí esté permitido y de esta manera evitarás ser sancionado por infractor.
Sin embargo, debemos insistir en que recoger los espejos retrovisores no es garantía de seguridad para el auto. Incluso aunque el lugar de estacionamiento sea permitido. No obstante, usar solo las zonas delimitadas para estacionar sí denota una conducta cívica y respeto por los demás.
Recuerda ajustar de nuevo los retrovisores
Si replegaste los espejos retrovisores mientras estabas estacionado, recuerda devolverlos a su posición cuando regreses al auto. Por seguridad, verifica antes de arrancar que esos espejos laterales tan fundamentales en el manejo estén la posición adecuada a tu altura.
Mantener los retrovisores limpios también debe ser una norma. Esto te permitirá tener mejor visibilidad y reduce también la posibilidad de reflejo o deslumbramiento si te iluminan las luces de otro auto.
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