No entran los cambios en el auto: por qué pasa y qué hacer
Los problemas al cambiar de marcha pueden ser frustrantes. Por qué no entran los cambios, cuáles son las causas y qué hacer.
El cambio de marchas es el momento en que adaptamos la potencia del motor a las condiciones de la carretera y la velocidad del vehículo. Es algo que la mayoría de los carros hoy, por tener transmisión automática, hacen sin necesidad de maniobras por parte del conductor. Sin embargo, si notas que no entran los cambios en el auto debes actuar rápidamente. No solo pone en riesgo tu seguridad y la de otros, sino que puedes romper el motor.
Por qué no entran los cambios en el auto: posibles causas
Si no entran los cambios en el carro, puede haber varias causas, desde problemas menores hasta problemas más graves que requieren atención inmediata. Aquí exploraremos las razones detrás de este problema:
1. Bajo nivel de líquido de transmisión
El líquido de transmisión es vital para el correcto funcionamiento de la caja de cambios. Si el nivel de este líquido es bajo, puede provocar dificultades al cambiar de marcha. El líquido de transmisión no solo lubrica los componentes internos de la caja de cambios, sino que también ayuda a mantener una temperatura adecuada y proporciona presión hidráulica para activar los embragues y los sincronizadores.
Un bajo nivel de líquido de transmisión puede indicar una fuga en el sistema, lo que debe abordarse de inmediato. Si no se corrige, podría provocar daños graves en los componentes internos de la caja de cambios. Por lo tanto, es crucial verificar regularmente el nivel de líquido de transmisión y rellenarlo si es necesario, utilizando el tipo de líquido recomendado por el fabricante del vehículo.
2. Embrague desgastado
El embrague es un componente esencial que permite la conexión y desconexión entre el motor y la transmisión. Con el tiempo, el embrague puede desgastarse debido al uso normal, lo que resulta en dificultades al cambiar de marcha. Los síntomas de un embrague desgastado incluyen un punto de enganche más alto o más bajo de lo normal, resbalones del embrague durante la aceleración y dificultad para cambiar de marcha.
Un embrague desgastado debe ser reemplazado para restaurar su funcionalidad. Ignorar un embrague desgastado puede provocar un mayor desgaste en otros componentes de la transmisión y, en última instancia, causar una falla completa del embrague, lo que requerirá una reparación más costosa.
3. Problemas en el sistema de cambio
El sistema de cambio de un automóvil incluye varios componentes, como cables de cambio, palanca de cambios, varillaje y soportes. Si alguno de estos componentes está desgastado, mal ajustado o dañado, puede provocar dificultades al cambiar de marcha. Por ejemplo, los cables de cambio desgastados pueden no transmitir correctamente el movimiento de la palanca de cambios a la caja de cambios, lo que resulta en cambios difíciles o imprecisos.
Es importante realizar un mantenimiento regular del sistema de cambio, que incluya la inspección y el ajuste de los componentes según sea necesario. Los problemas en el sistema de cambio suelen ser relativamente fáciles de diagnosticar y reparar, pero ignorarlos puede llevar a problemas más graves en la transmisión.
4. Sincronizadores desgastados
Los sincronizadores son componentes dentro de la caja de cambios que ayudan a que los engranajes se sincronicen correctamente durante el cambio de marcha. Cuando los sincronizadores están desgastados, pueden causar dificultades al cambiar de marcha, como chirridos, ruidos o resistencia al insertar la marcha.
Los sincronizadores desgastados suelen ser el resultado de un uso excesivo o abusivo de la transmisión, como cambiar bruscamente de marcha sin sincronizar adecuadamente los cambios. Reemplazar los sincronizadores desgastados es una tarea compleja que generalmente requiere el desmontaje y la reconstrucción de la caja de cambios. Ignorar los problemas de los sincronizadores puede provocar un mayor desgaste en otros componentes de la transmisión y eventualmente una falla completa del sistema de cambio.
No entran los cambios en el auto: consecuencias
Ignorar los problemas al cambiar de marcha y seguir forzando la transmisión puede tener consecuencias graves en los componentes internos del vehículo.
Desgaste adicional
Cuando los engranajes y otros componentes de la transmisión no se enganchan correctamente debido a problemas como un embrague desgastado o sincronizadores defectuosos, se produce un desgaste adicional. Este desgaste se acumula con el tiempo y puede resultar en daños costosos que requieran reparaciones extensas o incluso la sustitución completa de la transmisión. Es importante abordar los problemas de cambio de marcha de manera oportuna para evitar gastos innecesarios y prolongar la vida útil del vehículo.
Conducción insegura
Un automóvil que experimenta dificultades al cambiar de marcha puede volverse impredecible en la carretera, lo que aumenta significativamente el riesgo de accidentes. Por ejemplo, si el vehículo no puede cambiar a una marcha más alta cuando sea necesario, puede resultar en una pérdida de potencia y aceleración, lo que puede ser peligroso al intentar realizar maniobras como adelantamientos o incorporaciones a la autopista.
Del mismo modo, si el automóvil no puede cambiar a una marcha más baja en situaciones que lo requieran, como frenar repentinamente en una pendiente empinada, se puede perder el control del vehículo, aumentando así el riesgo de colisiones traseras u otros tipos de accidentes.
Cómo solucionar el problema si no entran los cambios en el auto
Verificar el nivel de líquido de transmisión
Asegurarse de que el nivel de líquido de transmisión esté dentro de los límites adecuados es fundamental para el correcto funcionamiento del sistema de transmisión. Para ello, localiza la varilla de medición del líquido de transmisión en el compartimento del motor, retírala, límpiala y vuelve a insertarla. Luego, retira la varilla nuevamente y verifica el nivel de líquido. Si está por debajo del nivel recomendado, agrega líquido de transmisión compatible con las especificaciones del fabricante hasta alcanzar el nivel adecuado.
Reemplazar el embrague
Si el embrague está desgastado, ya sea debido al uso normal o a un mal manejo, es necesario reemplazarlo para restaurar su funcionalidad. Esta es una tarea compleja que generalmente requiere el desmontaje de la transmisión, por lo que es recomendable que sea realizada por un mecánico experimentado.
Durante el reemplazo del embrague, también se pueden inspeccionar y reemplazar otros componentes relacionados, como el volante de inercia y el cojinete del embrague, si es necesario.
Revisar y ajustar el sistema de cambio
Es importante asegurarse de que los componentes del sistema de cambio, como los cables de cambio y la palanca de cambios, estén en buen estado y correctamente ajustados. Inspecciona visualmente los cables de cambio en busca de signos de desgaste, daños o corrosión, y reemplázalos si es necesario.
Ajusta la tensión de los cables y verifica que la palanca de cambios se mueva suavemente entre las marchas. Si la palanca de cambios está suelta o presenta holgura, es posible que necesite ajustes adicionales o incluso reemplazo.
Reparación de los sincronizadores
Si los sincronizadores están desgastados, la reparación puede implicar el reemplazo de estos componentes dentro de la caja de cambios. Este es un trabajo especializado que generalmente requiere el desmontaje completo de la transmisión. Un mecánico experimentado puede desmontar la transmisión, inspeccionar los sincronizadores y reemplazar aquellos que estén desgastados o dañados. Esta reparación puede ser costosa, pero es fundamental para restaurar el funcionamiento adecuado de la transmisión y evitar problemas futuros.
También puede interesarte: