Qué tubo de escape elegir para tu auto: tipos y recomendaciones
Descubre los diferentes tipos de tubo de escape para autos, sus beneficios y cuál es el más adecuado según el motor, uso y rendimiento que buscas.
Sistema de escape de auto. Crédito: Zaltrona | Shutterstock
Aunque muchos entusiastas creen que un tubo de escape más grande significa más potencia, la realidad es que no todos los sistemas de escape mejoran el rendimiento del motor. De hecho, con las regulaciones actuales sobre emisiones de CO₂, cada vez más autos vienen con sistemas de escape discretos y eficientes.
Si estás pensando en cambiar el tubo de escape de tu auto, debes conocer bien las opciones disponibles, sus ventajas y cuál es la más adecuada según el tipo de motor y uso que le das a tu vehículo.
Por qué es importante elegir un buen tubo de escape
El sistema de escape cumple funciones cruciales para el vehículo. Entre estas funciones se encuentran la filtración y expulsión de los gases de combustión que se genera en el motor. También reduce las emisiones contaminantes al medio ambiente, por lo que debe tener una construcción óptima.
Ayuda a mejorar la eficiencia del motor. Esto gracias a que puede regular la presión del motor, lo que asegura que no se consuma mucho combustible. Además, mejora el rendimiento y respuesta del acelerador por la regulación de esta presión.
Por último, un buen tubo de escape puede darle al auto una mejor estética y un sonido más deportivo si se elige correctamente. Aunque se debe estar pendiente si es necesario y funcional para el auto que tengas.
Tipos de tubo de escape para autos
Es importante comprender la funcionalidad de los tubos de escape y sus diseños. Los tubos de escape tienen varios tipos en sus formas y construcción de materiales.
Tubo de escape estándar
Estos son los más comunes porque son los que tienen de fábrica la mayoría de los autos. Por lo general son hechos de aluminio o acero inoxidable y otros componentes que combaten la corrosión. Al ser diseñados de fábrica, cumple con normas ambientales, tienen un bajo ruido y son los más económicos del mercado.
Tubo de escape de acero inoxidable
Los tubos de escape de acero inoxidable son considerados premium. Aunque sus diseños por lo general son básicos, pero son los recomendados si necesitas reemplazar el tubo de escape estándar de aluminio, lo mejor es que sea de acero inoxidable, pero son más costosos.
Estos tubos de escape los podemos encontrar en muchos modelos de autos premium. Además, son los que más se venden en las tiendas de accesorios de autos por su acabado pulido y brillante, lo que aumenta su estética.
Tubo de escape de doble salida
Los tubos de escape de doble salida son los más buscados por los entusiastas de los autos. Estos tienen un diseño más llamativo al tener dos salidas, lo que puede exaltar la potencia del auto. También mejoran el rendimiento del auto y generan un sonido de competición. Aunque tienen doble salida, muchos de ellos cumplen con las regulaciones del medio ambiente.
Su desventaja es que son mucho más costosos y su instalación requiere que sea por un profesional. Otro problema es que debe revisar que cumpla con los estándares de emisiones y ruidos, porque muchos de ellos generan mucho más ruido y gases al exterior, lo que puede generar multas.
Tubo de escape deportivo
Los tubos de escape deportivos son los más llamativos y buscados por los que buscan un mayor rendimiento para el auto. Estos son usados en muchas ocasiones por los que practican el tuning. Están hechos de materiales de alta calidad como acero inoxidable y titanio, por lo que su precio es bastante alto.
Además, vienen en varios tamaños y diseños, lo que proporcionan un mejor rendimiento, pero también un sonido deportivo. Al momento de acelerar, estos tubos de escape generan un sonido estilo rugido que brinda toda una experiencia deportiva. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que se debe analizar los decibelios que genera para no incurrir en una multa por el posible alto ruido que genera.
Cuál es el mejor tubo de escape para tu auto
Elegir un buen tubo de escape dependerá del tipo de auto que tengas. Por ejemplo, un auto con motor de cuatro cilindros que tenga una potencia entre 100 y 150 caballos de fuerza, un buen diseño de escape en aluminio o acero inoxidable puede ser la solución.
Con un motor poco potente, no vale la pena gastar en otros tipos de escapes. También se debe tomar en cuenta los lugares donde se circula. Si vives en una zona residencial y pasas frecuentemente por zonas tranquilas, instalar un escape deportivo o de doble escape no es una buena opción, ya que podrá ser molesto.
Recomendación final
No siempre más grande es mejor. Invertir en un tubo de escape debe hacerse con conciencia del tipo de auto, el uso que se le da, y las normativas vigentes. Consulta con un profesional antes de instalar sistemas modificados, y busca siempre opciones certificadas.
Te puede interesar:
