Carros deportivos japoneses más icónicos de la historia
Las marcas japonesas crearon una revolución en la creación de autos, por lo que los deportivos son muy codiciados.
El parque automotor japonés es uno de los que más autos vende en todo el mundo. Entre esos carros, los deportivos son bastante queridos tanto por los japoneses como en otros mercados como el europeo o norteamericano. Lo que más destaca en general de sus autos es el rendimiento y eficiencia.
En el segmento de los autos deportivos, la ingeniería automotriz japonesa ha producido algunos de los más famosos de la historia. Estos vehículos no solo muestran un rendimiento extraordinario, sino que también encarnan la innovación, el estilo y un significado cultural único. En este artículo te mostraremos cuáles son esos autos japoneses que todo el mundo volteó a verlos.
Los autos deportivos japoneses destacan por su ingeniería y diseño
En el parque automotor japonés, ha habido un gran número de autos deportivos a lo largo de la historia. La etapa más importante, se puede remontar a finales de los años 80 y la década de los 90. De ahí en adelante se establecieron y hoy en día algunos de esos modelos, con versiones actuales, siguen en el mercado.
Toyota Supra
El Toyota Supra, con su versión A80, es uno de los autos más icónicos hecho en Japón. Fue producido entre 1993 y 2002, con esa versión, aunque hoy en día está en venta una actualización con las siglas GR. Este auto destacó por su diseño, conducción y un poderoso motor de seis cilindros en línea 2JZ-GTE. Además, fue protagonista en series y películas como la conocida saga de “Rápidos y Furiosos”.
Mazda RX-7
El Mazda RX-7 tuvo mucho éxito en la industria japonesa. Su producción estuvo entre 1978 y 2002, pero su generación más destacada fue la tercera con los modelos FC y FD. Se dio a conocer por su poderoso motor rotativo Wankel y su diseño ligero. Su potencia, maniobrabilidad, y rendimiento lo hicieron uno de los grandes deportivos de su época. El modelo FD es el más recordado por su diseño, y que también fue protagonista en películas y series.
Subaru Impreza WRX STI
El Subaru Impreza no nació como un auto deportivo. Sin embargo, su incursión en el mundo de las carreras y en el rally, hizo que destacara la versión WRX STI. Este modelo salió a finales de los años 90 con un motor de cuatro cilindros turboalimentado y su sistema de tracción total. Además, todo el sistema de conducción, con suspensiones y amortiguadores de alto desempeño, logró destacar entre los demás. Hoy en día sigue en el mercado, pero solo con el nombre WRX.
Mitsubishi Lancer Evo
El Mitsubishi Lancer Evolution “Evo”, es otro auto que nació como un sedán familiar. Sin embargo, la versión Evo destacaba por ser la de alto rendimiento, ideal para carreras y competencias de rally. Su producción estuvo desde 1992 hasta el 2016, sus modelos más recordados son el Evo III, IV, V y VI por sus éxitos en competencias. Tenía un motor turboalimentado de cuatro cilindros en línea y su avanzado sistema de tracción integral.
Mitsubishi 3000 GT (GTO)
El Mitsubishi 3000 GT es uno de los grandes vehículos deportivos de la historia. Solamente tuvo 10 años de producción entre el 1990 y el 2000. Todavía, hoy en día se venden a buenos precios en el mercado de autos usados. Tiene un motor V6 Biturbo que genera 320 caballos de fuerza en su versión más potente.
Honda NSX
Honda a finales de los 80 presentó un superdeportivo, llamado el Ferrari japonés. El NSX marcó un antes y después en los deportivos. Su diseño de motor central, su construcción de aluminio liviano y la tecnología de motor VTEC establecieron nuevos estándares para los automóviles deportivos. El NSX no solo era una máquina de alto rendimiento, sino también un símbolo de la destreza de ingeniería de Honda, que influyó en el desarrollo de los futuros superautomóviles.
Nissan GT-R
El Nissan Skyline GT-R, en particular los modelos R32, R33 y R34 que producidos entre 1989 y 1998, es considerado el más importante de las versiones. Tiene un motor de seis cilindros en línea RB26DETT, sistema de tracción integral y aerodinámica avanzada, el R32 se ganó el apodo de “Godzilla” por su dominio en la pista de carreras. Actualmente, existe el GT-R que se vende con poderosos motores.
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