Volkswagen vuelve a sus orígenes con los nombres de sus autos
Este cambio estratégico honra el legado de Volkswagen y prepara el escenario para una nueva era de autos eléctricos que son fáciles de amar y de recordar.

El nuevo Volkswagen Tayron. Crédito: Volkswagen | Cortesía
Volkswagen, la icónica marca alemana, está dando un giro estratégico en su enfoque hacia los nombres de sus vehículos eléctricos. En un movimiento que busca reconectar con su legado y simplificar la experiencia del consumidor, la compañía ha decidido abandonar las denominaciones “ID” para adoptar nombres tradicionales más reconocibles.
Esta decisión, anunciada por su jefe de marketing y ventas, marca un regreso a los orígenes de la marca, evocando nombres que han sido parte de su historia, como Golf, Tiguan o Passat. Exploramos los detalles de esta estrategia, sus razones y lo que significa para el futuro de la marca.
Un cambio estratégico para conectar con los consumidores
La línea de vehículos eléctricos de Volkswagen, conocida bajo el prefijo ID, ha sido un pilar en su transición hacia la movilidad sostenible. Modelos como el ID.3, ID.4 o ID.Buzz han ganado popularidad, pero también han generado cierta confusión entre los consumidores.

Según estudios de la marca, los nombres numéricos no siempre resonaban con el público, que está más acostumbrado a los nombres tradicionales de Volkswagen, cargados de historia y emoción. Este cambio responde a una necesidad de claridad y de fortalecer la conexión emocional con los compradores.
Martin Sander, jefe de marketing y ventas, señaló que los nuevos modelos eléctricos de la marca llevarán nombres que reflejen su herencia y sean más fáciles de recordar. Este enfoque no solo busca facilitar la identificación de los vehículos, sino también reforzar la identidad de Volkswagen como una marca cercana y auténtica.
La influencia de la competencia y las tendencias del mercado
Volkswagen no es la primera marca en replantear su estrategia de nombres para vehículos eléctricos. Gigantes como Mercedes-Benz, que abandonó su línea EQ, y BMW, que reestructuró su serie i, han optado por enfoques similares. Audi, por su parte, también dejó atrás su sistema de nombres par-impar para sus modelos eléctricos y de combustión.

Este movimiento de Volkswagen se alinea con una tendencia en la industria automotriz hacia nombres más intuitivos y emocionalmente atractivos, alejándose de denominaciones que podrían percibirse como frías o técnicas.
La decisión también llega en un momento en que Volkswagen está consolidando su posición en el mercado de los vehículos eléctricos. En Europa, la marca ha superado a Tesla en ventas de EVs, lo que demuestra su creciente relevancia en el sector. Al adoptar nombres tradicionales, Volkswagen busca capitalizar esta fortaleza y atraer a un público más amplio, incluyendo a aquellos que valoran la nostalgia y el legado de la marca.
¿Qué nombres podemos esperar?
Aunque Volkswagen no ha revelado los nombres específicos que reemplazarán a la línea ID, es probable que veamos el regreso de denominaciones icónicas. Por ejemplo, se espera que el próximo Golf GTI eléctrico, que debutará antes de finales de la década, lleve un nombre que evoque su legado deportivo. Lo mismo podría aplicarse a futuros modelos inspirados en clásicos como el Scirocco o el Beetle, adaptados a la era eléctrica con un toque moderno.

Además, la estrategia podría incluir nombres completamente nuevos que mantengan la esencia de Volkswagen, combinando tradición con innovación. Este enfoque no solo reforzará la identidad de la marca, sino que también posicionará a sus vehículos eléctricos como opciones más accesibles y familiares para los consumidores.
Impacto en la experiencia del cliente y el futuro de la marca
El cambio en la nomenclatura refleja el compromiso de Volkswagen con la experiencia del cliente. Al eliminar la complejidad de los nombres numéricos, la marca busca que sus vehículos sean más fáciles de entender y elegir, especialmente para aquellos que están dando sus primeros pasos en el mundo de los autos eléctricos.
Este movimiento también podría tener un impacto positivo en el posicionamiento SEO de la marca, ya que nombres más reconocibles suelen generar mayor interés en búsquedas en línea.

Además, esta estrategia coincide con otros esfuerzos de Volkswagen para mejorar sus productos. Por ejemplo, la marca ha abordado críticas sobre la ergonomía y el diseño interior en modelos como el Golf GTI y el Golf R, incorporando botones físicos en el volante y mejorando la dinámica de conducción. Estos cambios demuestran que Volkswagen está escuchando a sus clientes y adaptándose a sus necesidades.
Un futuro prometedor para Volkswagen
El regreso a nombres tradicionales es más que un cambio cosmético; es una declaración de intenciones. Volkswagen quiere recuperar la conexión emocional con sus clientes mientras lidera la transición hacia la movilidad eléctrica. Con una gama de vehículos que combina innovación tecnológica, diseño atractivo y nombres que evocan su rica historia, la marca está lista para consolidar su lugar en el mercado global.
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