Cómo checar los 8 líquidos de un carro y cuándo cambiarlos

Sabemos, en general, que el nivel de combustible y el aceite del motor deben estar bien para que el auto funcione correctamente. Pero no son los únicos líquidos de carro importante que debes checar antes salir a la carretera o realizar un viaje. Hay 8 que son esenciales para operar y también para conservar el motor con vida.

Las funciones de los fluidos al interior del motor son lubricar, enfriar y hacer funcionar sistemas hidráulicos. Por supuesto, no todos tienen la misma importancia: si falta gasolina o aceite no va a arrancar o andará mal. Pero, salvo el líquido refrigerante y el agua del limpiaparabrisas, el resto de los fluidos son aceites lubricantes que cumplen distintas funciones al interior del motor, los frenos y la caja de transmisión.

Cómo checar los 8 líquidos de un carro y cuándo cambiarlos

Los líquidos de un carro son importantes porque, sin algunos de estos aceites, los metales internos tendrían un roce entre sí. Esto provocaría un desgaste que, poco a poco, afectará su funcionamiento, afectando el motor, los frenos o la transmisión, entre otros sistemas.

Aquí, los líquidos de carro que debes checar para cuidar tu vehículo y circular con seguridad.

Puedes ver: Señal de aceite en el tablero del auto: por qué se enciende la luz

Aceite de motor

La función principal del aceite de motor es lubricar y, en parte, enfriar todo el interior del motor. El aceite pasa por pistones, válvulas, bielas y cadena de distribución, entre otras partes y su presencia y buen estado son vitales. Sin aceite o con un aceite en mal estado, los metales se rozan y las piezas se desgastan o rompen. Es decir, el motor se funde inmediatamente.

Además, el aceite ayuda a controlar la temperatura del motor, evitando calentones. Por todo esto, es clave controlar los niveles de aceite y el color, para evaluar si es momento de cambiarlo. A la vez, debes seguir las recomendaciones del fabricante respecto a los servicios de mantenimiento, como cambio de aceite y filtro.

Líquido refrigerante

Es otro de los fluidos muy importantes. Los motores tienen un sistema de enfriamiento por líquido refrigerante, que se almacena en el radiador o en un depósito que está ubicado cerca de él. Al encender el motor, este líquido es el que permite que la temperatura no suba más de lo recomendado.

Hay distintos tipos de líquido refrigerante, más y menos sofisticados, sintéticos, orgánicos y mixtos. Lo que no debes usar jamás es agua común, de la llave, puesto que podría oxidar parte del sistema de refrigeración de tu motor.

El mecánico debería checar este líquido periódicamente. Es recomendable reemplazarlo cada dos años o 40 mil kilómetros para que trabaje en óptimas condiciones.

Líquido de transmisión

Su objetivo es lubricar la caja de transmisión. El tipo de aceite que use tu carro lo puedes ver en el manual del fabricante y es importante usar siempre el adecuado.

Si escuchas algún ruido o crujido al pasar cambios podría ser un indicador de falta de lubricante o mala calidad del mismo. El aceite de transmisión se reemplaza cada 80.000 a 100.000 kilómetros; 60.000 en el caso de los automáticos.

Líquido de frenos

El líquido de frenos es un fluido que se encarga de hacer que tu carro frene. Tiene propiedades anticorrosivas para no oxidar el sistema por dentro. Si los niveles no son adecuados o hay una fuga, tus frenos no responderán como corresponde. Lo recomendable es reemplazarlo cada 40 mil kilómetros para que conserve sus propiedades intactas.

Líquido de dirección o aceite del volante

El líquido de dirección es un aceite hidráulico que ayuda a que tu caja de dirección funcione correctamente. Si bien anteriormente las direcciones mecánicas antiguas solo utilizaban grasa, hoy es un líquido indispensable. Ayuda a controlar y transmitir los esfuerzos mecánicos, mediante variaciones de presión a la caja de dirección para hacerla más blanda.

Este líquido se reemplaza cada 100.000 kilómetros.

Puedes ver: Aceite de dirección: qué es, cuál elegir y por qué es clave su calidad

Líquido del diferencial

También conocido como aceite de engranaje, hace que el diferencial funcione bien al lubricar el piñón y la corona. También lubrica el clutch del carro para que puedas pasar de marcha. Sin la presencia de este líquido, se sobrecalentaría el diferencial y el carro podría quedar sin tracción. Por eso es fundamental que esté en buen estado.

El líquido de diferencial se cambia 60.000 a 70.000 kilómetros.

Puedes leer: Cómo cuidar el diferencial de tu carro

Líquido de embrague

Es un lubricante que hace que el trabajo del clutch o embrague sea más suave. Utiliza el mismo líquido que el sistema de frenos, porque al pisar el pedal del embrague se presuriza el sistema para su funcionamiento. Se reemplaza idealmente cada 40.000 a 50.000 kilómetros.

Líquido de limpiaparabrisas

Puedes usar agua común, pero hoy hay líquidos de limpiaparabrisas especialmente dedicados a la limpieza del vidrio frontal. Tienen propiedades anticorrosivas y se congelan a temperaturas más frías que el agua.

No tiene un tiempo determinado para su reemplazo. Debes checarlo periódicamente porque se va gastando ni bien lo utilizas.

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