Cómo quitar la llanta del rin manualmente y en casa

Quitar una llanta del rin puede ser una tarea un poco difícil, especialmente si no tienes las herramientas o la experiencia adecuadas. Sin embargo, con las técnicas y el equipo adecuados, es una tarea manejable que cualquiera puede realizar.

La dificultad de quitar una llanta del rin puede depender de varios factores, como el tipo de llanta, el estado en que se encuentra y las herramientas que tienes disponibles. Por ejemplo, quitar una llanta del rin de acero puede ser más desafiante que quitar una de uno aluminio porque las llantas de acero suelen ser más pesadas y rígidas. 

De manera similar, quitar una llanta de un rin dañado puede ser más difícil porque la llanta puede estar atascada o doblada.

Si tiene las herramientas adecuadas, como hierros para llantas, destalonadores y una máquina para llantas, el proceso puede ser mucho más fácil. Sin embargo, si intentas quitar un neumático del rin con la mano, puede ser un poco más difícil. Requiere mucho esfuerzo físico, paciencia y conocimiento de la técnica adecuada.

¿Cómo quitar la llanta del rin manualmente y en casa?

A diferencia de las llantas de motocicleta o las llantas de bicicleta, quitar la llanta de su auto de la llanta parece un trabajo complicado porque requiere más habilidades y debe tener algunos conocimientos básicos de mecánica. 

Sin embargo, si no tienes experiencia y quieres intentarlo, aquí te decimos cómo lo puedes hacer.

1.- Encuentra un lugar seguro para quitar el neumático

Debes encontrar una superficie plana para evitar que el vehículo ruede mientras cambia las llantas a mitad de camino. Puedes usar piedra u hormigón para bloquear los neumáticos delanteros y traseros. Esto ayuda a mantener tu auto balanceado cuando manipulas cualquier cosa.

2.- Levanta tu vehículo

Coloca el gato justo debajo del auto, cerca del neumático que se va a cambiar. Asegúrate de que el gato esté en contacto con la parte metálica del marco para un buen ajuste. Si no colocas el gato en el lugar correcto, romperás el plástico en esa parte cuando comiences a levantar el auto. 

3.- Saca el aire de la llanta

La forma más fácil de hacerlo es simplemente quitar el núcleo de la válvula. Si no sacas el vástago de la válvula y dejas el aire en la llanta cuando pones la llanta para destalonar. Hay una buena posibilidad de que su llanta explote. Por lo tanto, debes asegurarte de sacar el vástago de la válvula por completo.

4.- Romper el talón del neumático

Primero, debes saber qué es un talón de neumático. Esta parte es muy importante para tu neumático. Ayuda a ajustar de forma segura la llanta y sella la presión de inflado. Se puede encontrar en cada neumático en el lado interior y en el lado exterior. 

Existen algunos métodos que puedes aplicar para romper el talón del neumático. Puede usar algunas herramientas especializadas (abrazadera en C, barra de palanca o gato de botella) o incluso sus pies combinados con los metales planos.

Además, usar un Hi-jack también es una forma preferida, simplemente coloca el neumático y asegúrate de que el pie del gato debe estar lo más cerca posible de la llanta pero sin tocar la llanta. Es posible que debas romper el talón en 2 o 3 puntos de tu neumático. 

5.- Retira el neumático viejo con los pies

Debes usar la fuerza de tus pies para colocar el neumático para reducir el rasguño y aumentar el apalancamiento. Para evitar que la llanta se deslice, coloca la llanta sobre otras llantas o sobre una alfombra.

En este paso, puedes rociar jabón o aceite alrededor de la llanta para lubricarla. Durante la conducción, la llanta se adherirá al neumático, por lo que aplicar lubricante en los bordes de la llanta puede facilitar su extracción y el líquido para lavar platos es probablemente lo mejor que puedes tener a mano.

6.- Continúa usando un destornillador o una barra de palanca para quitar el borde

Coloca el neumático y el rin planos sobre el suelo, colocando el extremo plano de una de las barras elevadas entre el neumático y la llanta. Tire de la barra hacia atrás, colocándola plana en el centro de la rueda para llevar la primera parte de la llanta hacia el exterior de la llanta. Manten la barra de palanca en su lugar y fijala para que no se salga entre la llanta y el neumático. Una vez que haya terminado de trabajar en un lado de la llanta, simplemente voltee la llanta y realice los mismos pasos en el otro lado usando un destornillador y una barra de palanca. Luego, retira lentamente el neumático de la llanta comenzando en un punto y continuando en ambas direcciones.

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