Por qué es importante que los sensores del auto funcionen correctamente

En los últimos años, los fabricantes de autos y camionetas han incorporado diferentes tecnologías para optimizar el rendimiento, el confort y la seguridad de los vehículos. La cantidad de sensores es cada vez mayor y cumplen funciones cada vez más diversas. Aquí te contamos por qué es crucial que los sensores de un auto funcionen correctamente.

Los sensores de los autos juegan un papel vital en la operación, seguridad y eficiencia del vehículo. Están diseñados para advertir sobre algún funcionamiento irregular o un riesgo cercano. Avisan cuando detectan una fuga, un nivel de líquido bajo, una pieza defectuosa y una lista de problemas de lo más variados.

En general, toda esa información se envía en tiempo real a la computadora del auto, que “toma” las decisiones necesarias para cuidarte y cuidar tu vehículo.

Aquí te explicamos por qué son importantes los sensores de los autos:

1. Seguridad: Muchos sensores están directamente relacionados con la seguridad del vehículo y de sus ocupantes. Por ejemplo, los sensores de frenos (ABS), de estabilidad (ESC), y de airbags, garantizan que estos sistemas respondan de manera adecuada en situaciones críticas, como frenadas de emergencia o pérdida de control. Si alguno de estos sensores falla, podría comprometer la capacidad del vehículo para evitar accidentes o proteger a los ocupantes en caso de colisión.
2. Eficiencia del motor: Los sensores del motor, como los de oxígeno, temperatura y flujo de aire, son esenciales para que el motor funcione de manera eficiente. Estos sensores envían información al ECU (Unidad de Control del Motor), que ajusta la mezcla de aire y combustible, el tiempo de encendido y otros parámetros clave para optimizar el rendimiento y el consumo de combustible. Si un sensor falla, el motor podría funcionar de manera ineficiente, aumentar el consumo de combustible, o incluso causar daños a largo plazo.
3. Reducción de emisiones: Los sensores también son fundamentales para cumplir con las normas de emisiones, ya que ayudan a mantener la combustión del motor dentro de los límites permitidos. Por ejemplo, el sensor de oxígeno monitorea los gases de escape y permite ajustar la mezcla de combustible para reducir las emisiones contaminantes. Si los sensores no funcionan correctamente, el auto podría emitir más contaminantes, lo que no solo es perjudicial para el medio ambiente, sino que también podría llevar a fallar en pruebas de emisiones y requerir costosas reparaciones.
4. Rendimiento general del vehículo: Sensores como el de velocidad, el de posición del acelerador y el de presión de los neumáticos afectan directamente la conducción y el rendimiento del vehículo. Un sensor de velocidad defectuoso podría interferir con el control de velocidad, el control de tracción o el sistema de transmisión automática, mientras que un sensor de presión de neumáticos inexacto podría resultar en un desgaste desigual de los neumáticos y una menor eficiencia de combustible.

Por qué es importante que los sensores del auto funcionen correctamente

En algunos modelos, sus módulos de control orientados llegan a tener más de 200 sensores. Todos ellos, además de monitorear distintos sistemas, envían dicha información a la unidad de control del motor (ECM). Con esos “datos”, la computadora automáticamente realiza los ajustes necesarios para operar en óptimas condiciones en cuanto a la temperatura, refrigeración, presión del aceite, niveles de emisión, velocidad, etc.

Tipos de sensores de autos

• Sensor de flujo de aire: ubicado en el interior de la cámara de combustión, el sensor de flujo de aire es el encargado de medir el volumen y la densidad de este elemento que ingresa al motor para un rendimiento óptimo, así que si falla puede ocasionar que aumente el consumo de combustible.

• Sensor de detonación del motor: vigila el proceso de encendido de la mezcla de aire y combustible desde antes de que las bujías produzcan el chispazo necesario para hacer esto posible. Con respecto, al sensor de velocidad del motor envía la información adecuada para que la ECU calcule el tiempo exacto para realizar la inyección de combustible y activar a las bujías.

• Sensor de posición del árbol de levas: es el responsable de controlar la sincronización de este componente hasta lograr que el aire ingrese al cilindro y los gases quemados salgan en el momento adecuado.

• Sensor de voltaje: en cuanto a las revoluciones del motor se refiere, el encargado de monitorear que sean las adecuadas, es el sensor de voltaje, pero en caso de no emitir dicha información puede provocar una descompensación del corazón del vehículo.

• Sensor de temperatura de combustible o sensor ECT: una falla en su desempeño haría imposible detectar si el energético está frío al momento cuando se intenta quemar, lo cual le llevaría más tiempo, o bien si está caliente y termina por quemarse demasiado rápido. En ambos casos, eso implica un mayor o menor consumo de combustible.

Estos son algunos ejemplos. Hay más sensores que cumplen importantes funciones, pero ya puedes tener una idea general de la relevancia que tienen los sensores en los vehículos actuales.

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