Subasta de carros quitados por la policía: qué son y cómo aprovecharlas

Las subastas de carros quitados por la policía son espacios organizados por agencias, departamentos, alguaciles del condado, agencias policiales estatales y federales e incluso bancos en todo Estados Unidos. Estas agencias u organizaciones se encargan de recopilar vehículos derivados de confiscaciones, arrestos, crímenes, delitos o incumplimiento de pagos, pero también aquellos que han sido declarados como perdidos o abandonados.

De esa manera, pueden ofrecer un inventario bastante variado que representa una gran oportunidad para todas las personas que buscan autos usados a buen precio. Dentro de esta categoría de subasta también se incluyen aquellas que organizan los departamentos de policía para vender los vehículos oficiales que usaban en sus labores y que ahora se encuentran en desuso.

¿Cómo puedo aprovechar las subastas de carros quitados por la policía?

En todo el país, existen numerosas subastas policiales con una gran variedad de vehículos que ya no pueden ser devueltos a sus antiguos propietarios por temas legales. Como muchos departamentos de policía locales tienden a ofrecer este tipo de oportunidad, no es extraño que existan varias de estas subastas en un mismo condado o estado.

En pocas palabras, la disponibilidad para clientes que buscan una buena oportunidad de compra se multiplica en estos espacios. No obstante, es importante tener en cuenta algunas recomendaciones para sacar el mayor provecho en caso de querer encontrar un buen vehículo bajo esta modalidad:

1. Las subastas de carros quitados por la policía no solo ofrecen automóviles promedio, también cuentan con camionetas, bicicletas, camionetas, motocicletas, furgonetas, autocaravanas, entre otros.

2. Aunque existen algunos vehículos incautados por delitos, la gran mayoría de los ejemplares que subasta la policía han sido incautados por incumplimiento de acuerdos financieros (préstamos, financiamientos, etc.). Estos vehículos suelen estar en muy buen estado para el momento de la venta, ya que los términos y condiciones de esos acuerdos exigen el mantenimiento constante.

3. La mayoría de los vehículos incautados por incumplimiento tienden a ser confiscados por la policía durante los primeros meses del acuerdo financiero. En ese sentido, antes de elegir un auto confiscado por un delito, es recomendable tener como prioridad aquellos relacionados con acuerdos financieros. A menudo, tienden a estar menos usados.

4. Las subastas de carros quitados por la policía pueden ser aprovechadas tanto por conductores promedio como por aquellos que revenden vehículos. De igual forma, pueden representar una excelente oportunidad para talleres mecánicos y para personas que disfrutan de reparar vehículos por su cuenta.

5. Los vehículos que se ofrecen en subastas de la policía pueden encontrarse a muy buenos precios, permitiéndole a los compradores ahorrar cientos o miles de dólares en comparación con lo que gastarían en otros tipos de subasta o ventas de autos usados.

¿Cómo funcionan las subastas de carros quitados o incautados por la policía?

A pesar de que los vehículos que ofrecen tengan una procedencia diferente, las subastas de autos que organiza la policía funcionan de la misma manera que otras subastas de autos en Estados Unidos. En ellas, los vehículos incautados deben aprobar un proceso de inspección exhaustiva para determinar posibles daños internos o externos, así como daños en cada uno de sus componentes y sistemas. Esta inspección derivará en una lista muy descriptiva que será utilizada para valorar el vehículo y, más tarde, lo acompañará para que los posibles compradores puedan estar al tanto de las condiciones en las que se encuentra.

¿Cómo es el proceso de compra en una subasta organizada por la policía?

Cada estado organiza subastas de autos incautados, perdidos o abandonados bajo sus propias condiciones o reglas. No obstante, este tipo de eventos suelen ser similares entre sí y estar compuestos por las mismas etapas:

1. Con la inspección realizada al recibir cada vehículo, los organizadores de la subasta fijan un precio base o de reserva que representa el precio ideal que debería cubrir el comprador.
2. El día de la subasta, cada vehículo es mostrado para que los asistentes puedan verlo, constatar las condiciones en las que se encuentra y hacer sus ofertas.
3. El precio irá en aumento conforme existan postores dispuestos a pagar más.
4. El mejor postor, al final será el que se lleve el vehículo. A menudo estas subastas mantienen la puja hasta que se alcance el monto mínimo fijado o precio de reserva. Este valor es determinado por las autoridades luego de la inspección del vehículo, la cual considera: marca, modelo, antigüedad y posibles daños.

Al igual que las subastas habituales, aquellas que son organizadas por la policía pueden llevarse a cabo de manera presencial —a través de una casa de subastas— o en línea, permitiéndoles a los posibles compradores hacer una oferta desde donde se encuentren. El principal objetivo de las modalidades y de toda la disponibilidad de estas subastas es reducir el inventario, ya que las comandancias, departamentos y agencias del orden no cuentan con el espacio suficiente para almacenar por mucho tiempo este tipo de vehículos.

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