Cómo detectar una fuga lenta de aire en la llanta y cómo repararla

¿Tienes que poner aire en uno de tus neumáticos cada pocos días? Si es así, una de las llantas de tu automóvil podría tener una fuga de aire lenta. Más allá del fastidio de inflarla seguido y de ver en el tablero del carro que la presión está baja, es importante repararla porque afecta la conducción y hasta podrías destruir el neumático.

Afortunadamente, puedes verificar cuándo una llanta tiene una fuga e incluso remendarla en casa.

Detectar y reparar una fuga lenta de aire en las llantas es importante para mantener la seguridad y la eficiencia del combustible de tu vehículo. Aquí hay pasos para detectar y abordar este problema.

Puedes ver: Qué hacer cuando se enciende la luz de presión de los neumáticos en el tablero

Cómo saber si la llanta de tu automóvil tiene una fuga de aire

La mayoría de los automóviles modernos están equipados con un sistema de control de la presión de los neumáticos (TPMS) que notifica al conductor de un cambio de presión en cualquiera de los neumáticos del automóvil. Sin embargo, si sospechas que su vehículo tiene una fuga de aire y no tienes un sistema de monitoreo de presión de llantas, entonces hay una manera fácil de encontrarlo.

Primero, puedes inspeccionar visualmente la banda de rodadura de la llanta y verificar si hay pinchazos o clavos obvios en ella. Una fuga de aire lenta incluso puede ser causada por un orificio en la banda de rodadura o en la pared lateral. 

Sin embargo, el vástago de la válvula de aire o el talón de una llanta no asegurado también podrían ser los culpables. Para identificar la ubicación de la fuga, puedes comenzar tomando una botella de spray vacía y llenándola con agua jabonosa.

Detectar una fuga lenta de aire

• Inspección Visual: comienza por una inspección visual de tus llantas. Busca objetos incrustados como clavos o tornillos en la banda de rodadura. También presta atención a cualquier objeto afilado que pueda haber perforado la llanta.

• Revisión de válvulas y tapas: asegúrate de que las válvulas de las llantas estén apretadas y que las tapas estén en su lugar. Las válvulas suelen ser una fuente común de fugas lentas.

• Mezcla de agua y jabón: prepara una solución de agua y jabón. Aplica esta mezcla sobre la llanta y la válvula. Observa si aparecen burbujas. Las burbujas indicarán la presencia de una fuga de aire en ese lugar.

• Verificación de la presión de las llantas: si sospechas una fuga lenta, verifica la presión de las llantas con un medidor de presión de neumáticos. Esto te permitirá determinar si la pérdida de aire es significativa.

Cómo reparar el neumático después de detectar la fuga

Una vez que encuentres la fuga, puedes repararla tú mismo siempre que el pinchazo esté en la banda de rodadura del neumático y no en la pared lateral. Para reparar la fuga, puedes comprar un tapón de reparación de llantas o un juego de parches en tu tienda local de repuestos para automóviles. 

Si eliges reparar la fuga con un tapón, simplemente puede usar las herramientas del kit y reparar el orificio con la llanta aún montada en la rueda. Si optas por un kit de parche, tendrás que quitar la llanta por completo de la rueda para parcharla desde el interior. En este caso, será aconsejable buscar la ayuda en una llantera. 

Reparar una fuga lenta de aire

Una vez que hayas identificado el punto de fuga, puedes considerar las siguientes opciones para abordarlo:

• Reparación profesional: si la fuga es causada por una perforación o daño en la llanta, lo mejor es llevarla a un taller de neumáticos profesional. Ellos podrán reparar la llanta de manera segura y efectiva.

• Parche de neumático: si la fuga es causada por un objeto incrustado, es posible que puedas repararla con un parche de neumático. Esto es algo que puedes hacer tú mismo o puedes llevar la llanta a un taller para que lo hagan por ti. El parche sellará la fuga y mantendrá la integridad de la llanta.

• Reemplazo de la válvula: si la fuga se debe a una válvula defectuosa, esta puede ser reemplazada. Esto es un procedimiento sencillo que puedes hacer tú mismo o que un mecánico puede llevar a cabo en pocos minutos.

• Reemplazo de la llanta: en algunos casos, si la llanta está dañada o gastada en exceso, es mejor reemplazarla por completo para garantizar la seguridad.

• Mantenimiento preventivo: después de resolver la fuga, asegúrate de que todas las llantas estén infladas a la presión correcta según las especificaciones del fabricante y realiza un seguimiento periódico para detectar futuras fugas.

Recuerda que mantener las llantas en buen estado es esencial para la seguridad y el rendimiento de tu vehículo. Una presión de neumáticos adecuada y la detección temprana y reparación de fugas lenta de aire pueden ayudarte a mantener un manejo seguro y a ahorrar en consumo de combustible.

Puedes ver: Ponchera cerca de mí: cómo ubicar una llantera en tu zona

¿Un sellador de neumáticos reparará la fuga?

Si bien los selladores de llantas como “Fix-a-Flat” pueden sellar pequeños pinchazos en una llanta, están destinados principalmente a ser una solución temporal. La verdadera solución para arreglar cualquier pequeña fuga de llantas es taponearlas o repararlas. Si el daño es demasiado grande, es posible que debas reemplazar el neumático por completo.

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