Fallas en la palanca de cambios automática: qué hacer
Descubre cuáles son las fallas más comunes de las palancas y cajas de transmisión automáticas y cómo puedes mantener el sistema en buen estado.
Las fallas en la palanca de cambios automática pueden ser muy diversas: las causas pueden ser menores o te puedes topar con problemas más serios, que afectan el funcionamiento general del vehículo. La clave es abordar el tema rápidamente para evitar daños mayores.
A continuación, enumeramos algunas fallas comunes en la palanca de cambios automática y qué hacer en cada caso.
- Fallas comunes en la palanca de cambios automática: qué hacer
- Las fallas más comunes en una palanca automática
- Dificultad para mover la palanca de cambios
- Problemas en el cable del cambio
- La palanca de cambios no se bloquea en la posición “P” (Parking)
- La palanca de cambios se siente floja o tiene demasiado juego
- La palanca de cambios no responde o se queda atascada en una marcha
- La palanca de cambios se mueve, pero el vehículo no cambia de marcha
- Ruidos extraños al mover la palanca de cambios
- Patinado en las llantas
- No puedes hacer los cambios de velocidad
- Mantener en perfecto estado la transmisión automática
Fallas comunes en la palanca de cambios automática: qué hacer
Como adelantamos, las fallas en la palanca de cambios automática pueden ser diversas. Pueden ser problemas simples, como la activación accidental del freno de estacionamiento, hasta cuestiones más complejas, relacionadas con el sistema y los componentes de la transmisión.
Los vehículos que cuentan con palanca automática son más fáciles de conducir y ofrecen una experiencia de marcha más suave, superior a los que tienen transmisión manual. Pero es un sistema complejo que necesita cuidado.
Las fallas más comunes en una palanca automática
Aunque los autos con transmisión automática son más fáciles de manejar, no indica que están exentos de fallas. A continuación te vamos a hablar de las más comunes y cómo puedes mantenerla en óptimas condiciones.
Dificultad para mover la palanca de cambios
Si la caja no cambia de marcha, lo primero es chequear que el freno de estacionamiento esté desactivado: si el freno está activado, la palanca de cambios puede bloquearse.
A su vez, algunos vehículos tienen un bloqueo que impide mover la palanca a menos que el pedal del freno esté presionado. Se llama bloqueo de seguridad. Verifica este tema también y pisa el pedal del freno completamente al intentar mover la palanca.
También hay que revisar las presiones que se realizan en la caja de velocidades. Lo ideal es llevar el carro a un experto en cajas de transmisión, ya que en un taller general no harán la revisión en profundidad.
Problemas en el cable del cambio
Si el cable que conecta la palanca de cambios a la transmisión está dañado o desajustado, puede dificultar el movimiento de la palanca.
La palanca de cambios no se bloquea en la posición “P” (Parking)
Cuando la palanca no se mueve de Parking, puede haber un desgaste en el mecanismo de bloqueo de la palanca o en el interruptor de seguridad. También pueden haber problemas eléctricos o en el solenoide de bloqueo.
Verifica si el problema se presenta de manera intermitente o constante. Si es intermitente, puede estar relacionado con un interruptor de freno defectuoso o un solenoide de bloqueo dañado. Consulta a un mecánico para revisar y reparar o reemplazar las piezas necesarias.
La palanca de cambios se siente floja o tiene demasiado juego
La causa posible es el desgaste o desajuste en los componentes internos de la palanca de cambios.
También pueden haber problemas con los bujes o los cables de la palanca.
Si la palanca de cambios tiene demasiado juego, es recomendable que un mecánico inspeccione el mecanismo para identificar si es necesario ajustar o reemplazar componentes desgastados.
La palanca de cambios no responde o se queda atascada en una marcha
En general, es algo asociado a problemas en la transmisión automática, como un bajo nivel de líquido de transmisión o componentes internos dañados. También puede haber un fallo en el sensor de posición del selector de marchas o en el módulo de control de la transmisión.
¿Qué hacer? Verifica el nivel del líquido de transmisión y rellénalo si está bajo. Si el líquido tiene un color oscuro o un olor quemado, podría ser necesario cambiarlo. Si el problema persiste, lleva el vehículo a un taller para que un técnico pueda diagnosticar y reparar la transmisión o los sensores involucrados.
La palanca de cambios se mueve, pero el vehículo no cambia de marcha
La causa puede ser una desconexión o daño en el enlace de la palanca de cambios. También ocurre cuando hay problemas en la transmisión, como un embrague o engranaje defectuoso.
Si sospechas que el enlace de la palanca de cambios está desconectado, un mecánico puede verificar y reparar la conexión. Si la transmisión presenta fallas, podría ser necesario repararla o reemplazarla.
Ruidos extraños al mover la palanca de cambios
Ocurre cuando hay desgaste en los componentes internos de la palanca o en la transmisión. También, cuando hay problemas en los bujes o en el mecanismo de la palanca.
Escucha con atención para identificar el tipo de ruido (golpes, chirridos, etc.) y cuándo ocurre (al cambiar a una marcha específica). Un técnico puede inspeccionar los componentes de la palanca y la transmisión para identificar y resolver la causa del ruido.
Patinado en las llantas
Si sientes un patinado en todas las marchas al cambiar de velocidad, indica que la caja de la transmisión automática ya está presentando fallas. Debes revisar el nivel de aceite: es posible que esté bajo, de ser necesario rellenar.
No puedes hacer los cambios de velocidad
Este problema puede deberse a que el filtro de aceite está sucio y debe realizarse un cambio de inmediato, tanto de dicho líquido como del filtro.
Estas son las principales fallas que llegan a presentar las cajas de transmisión automáticas. Si experimentas alguna de ellas, es importante abordar el problema rápidamente para evitar daños mayores y garantizar la seguridad al conducir. En muchos casos, un diagnóstico y reparación profesional serán necesarios para resolver el problema adecuadamente.
Mantener en perfecto estado la transmisión automática
Aunque tu auto no presente fallas a simple vista, es importante que tu mecánico de confianza revise la transmisión automática una vez al año. Recuerda que tu seguridad está en riesgo si hay fugas de aceite de transmisión o si notas cambios de velocidad de manera abrupta. Esas son dos señales de alerta importantes que debes considerar.
A su vez, ten en cuenta que el aceite de la transmisión se debe revisar cada 20,000 kilómetros.
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